Madrid.- El ministro de Fomento, José Blanco, ha animado hoy a recorrer a pie o en bici los más de 1.800 kilómetros de viejo trazado ferroviario convertidos en itinerarios turísticos, una "fuente de riqueza y empleo" para la población del medio rural.
En el acondicionamiento de las viejas líneas férreas, el Gobierno ha invertido cien millones de euros desde 1993, ha indicado el ministro, que ha apostado por este turismo ecológico, de ocio y "de cero emisiones de efecto invernadero".
Se trata de "devolver a la sociedad aquello que fue tomado hace un siglo como motor de progreso", ha señalado Blanco, quien ha asegurado que la red seguirá aumentando con nuevos planes de dinamización turística e itinerarios de gran longitud.
Hoy se trabaja en ampliar la red con 34 nuevos itinerarios, que se sumarán a los ochenta repartidos en toda España, ha explicado el presidente de Adif, Antonio González, que patrocina esta conferencia europea de tres días de duración, organizada por la Fundación de Ferrocarriles Españoles y la Asociación Europea de Vías Verdes.
El objetivo de la reunión del centenar de responsables políticos y técnicos será avanzar en el diseño de una red europea de vías verdes, conectándolas entre países y añadiendo otros caminos naturales.
Pese a la ausencia de datos globales sobre la utilización de las vías, la directora de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, Carmen Aycart, ha explicado que sólo la de Girona acumula anualmente 1,3 millones de usos y rutas más apartadas como la de la Sierra (en las provincias de Cádiz y Sevilla) supera los 100.000 anuales.
El concepto de Vía Verde comprende no sólo el acondicionamiento del trazado ferroviario, sino también la rehabilitación de antiguas estaciones para instalar servicios y equipamientos (alquiler de bicicletas, restaurantes, alojamiento, centros de interpretación...) y, además, ayudan a la puesta en marcha de planes de desarrollo local.
Los usuarios de estos caminos -jalonados de viaductos y túneles en paisajes muchas veces vírgenes- se están incrementando y, además, gastan de media un 50 por ciento más en alojamientos y restauración, ha informado a Efe la directora de la Asociación Europea de Vías Verdes, Mercedes Muñoz.
Según Muñoz y Aycart, se trata de un "movimiento imparable" que, además de su dimensión turística, posee una vertiente social: contribuye al desarrollo de estas zonas -muchas veces con altas tasas de desempleo-, y sus habitantes se benefician de una opción adicional de ocio y de salud.
Es también una infraestructura "idónea" para las personas con discapacidad, ya que las líneas férreas discurren por lugares sin prácticamente pendientes y la restricción del tráfico motorizado proporciona un elevado nivel de seguridad, ha añadido Aycart.
En el acto de apertura, Pedro Ortún, de la Dirección General de Nuevos Enfoques Industriales y Turismo de la Comisión Europea, ha señalado que las Vías Verdes suponen un modelo turístico "plenamente coherente" con el desarrollo sostenible, incluidas sus dimensiones económica, social y ambiental.
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) es titular de 4.006 kilómetros de líneas cerradas o de construcción abandonada que cuentan con una superficie de casi 71 millones de metros cuadrados; en ellas se encuentran 432 recintos ferroviarios que en su día soportaron el tráfico de viajeros y/o mercancías. (foto) (vídeo) (audio)
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