CE protegerá el audiovisual en un pacto con EEUU que no convence a cineastas

  • Bruselas garantizó hoy que el sector audiovisual europeo mantendrá todas sus medidas de apoyo en el marco del futuro acuerdo de libre comercio entre la UE y EEUU, un mensaje que sigue sin convencer a los cineastas, que exigen que la cultura quede totalmente al margen de ese convenio.

Bruselas/Estrasburgo (Francia), 11 jun.- Bruselas garantizó hoy que el sector audiovisual europeo mantendrá todas sus medidas de apoyo en el marco del futuro acuerdo de libre comercio entre la UE y EEUU, un mensaje que sigue sin convencer a los cineastas, que exigen que la cultura quede totalmente al margen de ese convenio.

El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, expuso hoy a una delegación del mundo del cine las "líneas rojas" que el Ejecutivo comunitario plantea de cara a las negociaciones con Washington, pero no logró tranquilizar a una industria que teme verse arrollada por el poderío de Hollywood.

"La excepción cultural no es negociable. No habrá regateo con la cultura", aseguró Barroso tras reunirse con ese grupo de cineastas, entre los que figuraban el director francogriego Costa Gavras, el belga Lucas Belvaux o la protagonista de "The Artist", la franco argentina Bérénice Bejo.

El político portugués insistió en que "la diversidad cultural estará plenamente protegida en las futuras negociaciones con Estados Unidos", y aseguró que Bruselas ha planteado "garantías adicionales para asegurar que nadie pueda dudar" de ello.

Sin embargo, los cineastas que viajaron a Estrasburgo (Francia) se declararon tras el encuentro "decepcionados" por la actitud del Ejecutivo comunitario y aseguraron que Barroso no escuchó sus demandas.

"Lo que está en juego en el acuerdo es el derecho de los pueblos a hablar su lengua, su identidad, su cultura y tener un punto de vista libre sobre sí mismos y los demás", explicó Gavras en una conferencia de prensa.

Según el director, sin la llamada excepción cultural "volverá la publicidad a las películas en televisión, desaparecerá el cine europeo de la cartelera y las grandes distribuidoras y productoras americanas invadirán nuestra sociedad".

El sector audiovisual volvió a pedir a la CE quedar excluido totalmente de las negociaciones comerciales a solo tres días de que los Veintisiete traten de cerrar el mandato que darán a Bruselas para negociar con las autoridades estadounidenses.

Hasta ahora, Francia ha sido el país que se ha alineado más claramente junto a los creadores, mientras que una mayoría de socios defiende que se incluya al audiovisual en la negociación, pero con salvaguardas, según fuentes europeas.

España es partidaria de proteger a la industria europea y de garantizar una "competencia razonable" con las producciones extranjeras, según dijo hoy a Efe el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, de visita en Estrasburgo.

La CE, que tiene la iniciativa en el ámbito comercial, ha propuesto a los Veintisiete tres "líneas rojas" para garantizar la continuidad de la llamada "excepción cultural", según un documento al que ha tenido acceso Efe.

La primera señala que en la negociación con EEUU no se verá afectado "ninguno de los mecanismos existentes en la UE o los Estados miembros para la promoción de trabajos europeos".

Eso incluye tanto a las cuotas que garantizan la emisión en televisiones de un mínimo de programas europeos como las disposiciones que facilitan la financiación de producciones hechas en el continente.

La segunda salvaguarda protege "todos los tipos de subsidios" que recibe el sector audiovisual, mientras que la tercera pretende garantizar que la UE y sus países mantendrán "un margen" para imponer más medidas de protección con vistas, sobre todo, a adaptarse al ámbito digital.

Bruselas considera que esas disposiciones serían suficientes para garantizar toda la protección que necesitan las producciones europeas y cree que excluir en bloque el audiovisual jugaría en su contra en el conjunto de las negociaciones con Washington.

"Excluir todo un sector es limitar nuestra ambición para el conjunto de la negociación", explicó Barroso, que señaló que eso crearía abriría la puerta a Washington para tratar de dejar fuera ámbitos en los que Europa cree que puede ganar terreno con la liberalización comercial.

Entre las áreas que EEUU podría tratar de proteger figuran ámbitos como la contratación pública, los servicios financieros, las aerolíneas o el transporte marítimo, según fuentes comunitarias.

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