Corea del Norte rechazó la visita de un enviado chino, según diario del Sur

  • Corea del Norte rechazó la propuesta de China de enviar al país a un representante especial para pedir al régimen de Kim Jong-un que desista de realizar su anunciada tercera prueba nuclear, informó hoy el diario surcoreano Chosun Ilbo.

Seúl, 7 feb.- Corea del Norte rechazó la propuesta de China de enviar al país a un representante especial para pedir al régimen de Kim Jong-un que desista de realizar su anunciada tercera prueba nuclear, informó hoy el diario surcoreano Chosun Ilbo.

El rotativo, que citó fuentes diplomáticas sin identificar, asegura que China y Corea del Norte no han logrado llegar a un acuerdo tras varios intentos de Pekín de presionar a su histórico aliado comunista para que no lleve a cabo el próximo ensayo atómico que anunció a finales de enero.

China propuso días atrás a Corea del Norte despachar a Pyongyang a su enviado especial para asuntos de la península coreana, Wu Dawei, pero el régimen expresó su rechazo a la iniciativa, según las fuentes citadas por Chosun Ilbo.

Además, autoridades diplomáticas de ambos países mostraron discrepancias después de que Pyongyang anunciara el 24 de enero su intención de realizar la prueba nuclear, acción criticada por China pero que el Gobierno norcoreano considera de legítima defensa mientras reclama la no injerencia exterior.

Mientras, en Corea del Sur la presidenta electa del país, Park Geun-hye, y los principales líderes de la oposición emitieron un comunicado conjunto en el que expresaron su preocupación por el posible ensayo atómico del régimen norcoreano, al que instaron a dar de inmediato marcha atrás a sus planes.

Corea del Norte "se enfrentará a una fuerte respuesta" de la comunidad internacional y la ONU si sigue adelante con la prueba nuclear y "otras provocaciones", expresaron en su comunicado los líderes políticos del Sur, que instaron a su vecino a acatar las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Este organismo amplió a finales de enero las sanciones que ya imponía a Corea del Norte como castigo al lanzamiento, en diciembre, de un cohete de largo alcance con el que el país comunista puso en órbita un satélite espacial, al considerar la acción una prueba de misiles encubierta.

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