España debe atraer a nuevos segmentos de demanda que generen más ingresos

  • El reto de España, por encima del número total en términos absolutos de turistas, es atraer a nuevos segmentos de demanda con capacidad para desestacionalizar la actividad y de generar más ingresos.

Gyeongju (Corea del Sur), 14 oct.- El reto de España, por encima del número total en términos absolutos de turistas, es atraer a nuevos segmentos de demanda con capacidad para desestacionalizar la actividad y de generar más ingresos.

Es lo que realmente importa, ha asegurado a EFE el director general de Turespaña, Antonio Bernabé, en el marco de la XIX asamblea general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), que ha concluido hoy en la ciudad coreana de Gyeongju.

Las intervenciones de los distintos países en esa reunión han demostrado que la fortaleza y el potencial que tiene el turismo para el crecimiento económico y para la creación de empleo quiere ser aprovechada por todos, y, como consecuencia, cada vez hay más destinos y más competencia.

Por tanto, el reto para España es seguir liderando el turismo mundial en base a la experiencia acumulada, al alto nivel de infraestructuras, a la seguridad que ofrecen los destinos españoles y, sobre todo, a la diversidad y el cada vez mayor nivel de especialización de la oferta.

Dado que la desestacionalización está vinculada a los productos, en la medida en la que España sea capaz de generar nueva oferta que permita trabajar durante todo el año, se irá avanzando cada vez más en ese ámbito.

En este sentido, ha destacado el turismo sénior europeo que, aunque aún maneja cifras pequeñas, ya está cumpliendo su objetivo de traer a turistas de países que apenas viajaban a España, generando nuevos flujos y nuevos mercados, especialmente del este de Europa.

Los países que más han utilizado el programa han sido Polonia, con 18.432 turistas, y Grecia, con 15.449, y tras dos años estos mercados también crecen en términos de llegadas en general.

En el caso de Polonia, fueron 6.892 turistas en 2009-2010 y 11.540 en 2010-11, y el número total de llegadas de este país pasó de 167.444 turistas en 2009 a 433.649 en 2010, mientras que hasta agosto de este año, su crecimiento interanual fue del 25,8 %.

En cuanto a Grecia, el éxito se produjo en el periodo 2009-10 en el que vinieron 15.254 turistas con el programa y el número total de llegadas de este mercado pasó de 81.787 en 2009 a 148.597 en 2010, lo que supone un aumento del 81 %.

Este año, que cerrará con unos 57 millones de entradas internacionales -y aunque no se llegará a las cifras previas a la crisis, se observa ya una clara recuperación-, destaca el crecimiento de países como Rusia, Brasil, Italia o Países Nórdicos, lo que permite ir hacia una mayor diversificación de los mercados emisores de España.

Asimismo, a la buena marcha del turismo ha contribuido la recuperación económica de algunos de los mercados tradicionales de España, especialmente el británico, que había bajado en estos dos últimos años de manera notable, y el desvío de turistas del norte de África, al que podría deberse un 30 % del crecimiento, aunque es muy difícil hacer este tipo de cálculos, ha insistido Bernabé.

A su juicio, lo que ocurra en lo que queda de año tendrá ya una influencia muy menor en el resultado global de año.

Aunque el turismo parece estar ya en la senda de recuperación, también es cierto que hay todavía mucha incertidumbre económica y, sobre todo, un escenario de profundas transformaciones y cambios en el conjunto de la economía y especialmente en el mercado turístico, ha advertido.

Esto "nos tiene que hacer responsables" de la necesidad de reforzar la cooperación entre todos los agentes públicos, todas las administraciones y entre éstas y el sector privado, y sobre todo de abordar procesos de cambio en los modelos de gestión, para adaptar las estructuras del tejido empresarial español y del propio modelo de cooperación pública al nuevo entorno.

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