Díaz Ferrán logra que su candidato desbanque a Bárcenas al frente de CEPYME

  • Madrid.- El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, logró hoy que su candidato, Jesús Terciado, desbanque a Jesús Bárcenas al frente de la patronal de las pymes (CEPYME).

Jesús Terciado, nuevo presidente de CEPYME al vencer a Jesús Bárcenas
Jesús Terciado, nuevo presidente de CEPYME al vencer a Jesús Bárcenas

Madrid.- El presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, logró hoy que su candidato, Jesús Terciado, desbanque a Jesús Bárcenas al frente de la patronal de las pymes (CEPYME).

La asamblea general electoral de CEPYME, tras cuatro horas de reunión, eligió hoy como nuevo presidente de la organización al presidente de la confederación empresarial de Castilla y León, Jesús Terciado, con 243 de los 381 votos emitidos, frente a los 138 vocales que apoyaron a Bárcenas.

Este resultado pone fin a la confrontación manifiesta entre Bárcenas y Díaz Ferrán por el control de CEPYME, que va más allá de esta contienda electoral.

Las desavenencias entre ambos son públicas y conocidas desde que el que fuera vicepresidente y secretario general de la confederación, Juan Jiménez Aguilar, presentara su dimisión, antes de que Díaz Ferrán le destituyese, en septiembre de 2008.

Entonces, Bárcenas apoyó incondicionalmente a Jiménez Aguilar y reprochó el comportamiento de Díaz Ferrán.

En el presente proceso electoral, Bárcenas ha acusado reiteradamente al presidente de la CEOE de apoyar de "forma descarada" la candidatura de Unidad Empresarial, encabezada por Terciado, y de utilizar toda la maquinaria de la organización para "apuntalarle".

Tras ser elegido presidente, Terciado recordó hoy que es la primera vez que se ha producido una confrontación electoral, tanto en el seno de la CEOE, como de CEPYME y subrayó que debe interpretarse como "libertad democrática."

Aunque reconoció el apoyo de Díaz Ferrán, dijo que nunca se ha planteado la campaña pensando en legitimar o deslegitimar a nadie sino en el trabajo necesario para las pymes y los autónomos.

A una pregunta de los periodistas sobre la paradoja de que el miembro del Comité Ejecutivo de Confemetal, Antonio Garamendi, previsiblemente sea el número dos de CEPYME y de que esa misma patronal haya pedido la dimisión de Díaz Ferrán, Terciado respondió que no le consta que haya sido así.

"No me consta que Confemetal haya pedido la dimisión de Díaz Ferrán", contestó, y añadió que trabajará por las pymes y los autónomos con "absoluta lealtad" hacia la CEOE.

Con respecto al "resto de los asuntos", dijo que "en un momento determinado" si hay que ponerlo sobre la mesa "lo hará", pero dentro de los órganos de gobierno de la organización.

También manifestó su deseo de ser el presidente de toda la organización y oír todas las opiniones "desde la unidad".

Terciado subrayó que CEPYME será "beligerante, contra las administraciones que nos estrujen, contra los políticos que quieran engañarnos y contra los sindicatos que no nos respeten o no comprendan lo específico de nuestra función".

Además, afirmó que la organización no estará mediatizada por la concesión de contratos públicos o por la presión de gobiernos centrales o autonómicos.

Junto con la idea de unidad e independencia, Terciado también abogó por el trabajo en equipo con "todos los que tienen algo que aportar", al tiempo que manifestó su voluntad de "hacerse más presentes y decisivos" en la economía española.

Asimismo, Terciado anunció la convocatoria para esta tarde del comité ejecutivo para nombrar secretario general y vicepresidentes.

Ante una posible fractura dentro de la organización -ya que Bárcenas ha obtenido el 36% de los votos- indicó que si la hubiera, procurará que no se extienda y que hará lo posible por "integrar".

En este sentido, señaló que "hay posibilidad de ampliar el Comité Ejecutivo" y que existen muchas áreas de trabajo dentro de la organización.

Preguntado sobre la huelga general que han convocado los sindicatos, respondió que "no es el momento" y subrayó que incluso ellos han reconocido la necesidad de una reforma laboral.

Al respecto, interpretó como una "debilidad" que convoquen la huelga para dentro de tres meses y afirmó que "hay margen para convencerles".

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