Director Eurosport: En España debe haber un ajuste de los derechos deportivos

Madrid, 8 jun.- Un ajuste real es lo que para el director de Eurosport España, Luis Fuentes, debe producirse respecto a los derechos deportivos, ya que los contratos firmados cuando el país vivía una situación económica muy boyante y que aún siguen en vigor, "sentaron el nivel de mercado" de los que se venden actualmente.

En una entrevista con EFE, Fuentes (Madrid, 1969) analiza el panorama actual de la televisión de pago en España, donde cree que debería darse una transición natural del abierto al pago, si bien apuesta porque esas dos formulas coexistan.

Según Fuentes, que sostiene que a diferencia de otros países europeos en España la gente no concibe como algo normal pagar por televisión, en el momento en que haya una oferta más amplia, las plataformas ofrecerán sus servicios más baratos y el precio dejará de ser una barrera para mucha gente.

PREGUNTA: Hágame una radiografía de la televisión de pago en España.

RESPUESTA: Es un momento complicado de definir. Venimos de muchos años en los que ha estado relativamente estable aunque no haya sido muy boyante. Tenemos una penetración bastante baja comparada con otros países europeos y parece que no se ha conseguido superar en los últimos años, en los que había tres operadores principales: ONO, Digital + y Telefónica, y en los últimos meses ha habido un cambio radical de escenario.

Telefónica se ha lanzado a comprar derechos deportivos para reforzar su oferta de pago en Movistar TV y parece que se va a hacer con Digital +; se han reducido 9 licencias de la televisión en abierto, y a ONO lo ha comprado Vodafone, con lo cual es un momento de cambio bastante profundo.

P: Con un índice de penetración de la televisión de pago del 23,5 en España, si lo comparamos con el 100 % de Holanda o el 97 % de Bélgica, ¿cómo afecta este entorno a los planes de Eurosport España?

R: Nos vemos en un mercado mucho más restringido y mucho más complicado. En Holanda, en Bélgica, e incluso en Portugal, que hay una penetración muy alta, la televisión de pago se considera un 'commodity': cuando te cambias de casa, con la luz y el gas das de alta la televisión.

La gente concibe como algo normal pagar por televisión, esto no pasa en España. Aquí es más difícil hacer entender a la gente que la televisión, para que tenga una cierta calidad, para que ciertos derechos estén a disposición y que su cobertura sea buena, hay que pagar por ellos. No hay tradición de pago en España, no hay una cultura de televisión de pago porque ha habido una oferta en abierto muy potente.

Además, el problema de la piratería está bastante extendido y arraigado, aunque ahora parece que hay un esfuerzo del legislador para evitarlo.

P: ¿Cómo se puede cambiar esa mentalidad?

R: Parece que los movimientos que hay últimamente tienden a esto. Están saliendo algunos derechos principales del entorno de la televisión en abierto, con lo que la de pago será cada vez más atractiva. Hay una normativa antipiratería, aunque falta quizá un esfuerzo educativo para que la gente entienda que piratear contenidos no está bien.

Además, la tele de pago tiene el desafío de presentar un producto y un servicio mucho mejor que el que había hasta ahora, con alta definición, con servicios multipantalla... y parece que las plataformas están apostando fuerte por ello.

P: ¿Considera que los derechos deportivos en España están muy por encima de lo que se debería pagar?

R: Sí, yo creo que son caros en todas partes pero en España hemos tenido una situación económica muy boyante durante unos años en la que se firmaron los últimos contratos de derechos deportivos que siguen en vigor ahora y que sentaron el nivel de mercado de los derechos que se siguen vendiendo ahora. Aún no se ha producido un ajuste real.

Ha coincidido además con un 'boom' del deporte español porque llevamos 10 años en los que ha estado a un nivel que nunca había estado y el interés del gran público, que muchas veces se mueve por las victorias o los grandes campeones, también se ha disparado, lo que ha hecho que haya más demanda y, por lo tanto, que suban los precios.

Debería producirse un ajuste, sobre todo en ciertos derechos; hay otros que seguirán congregando a mucha gente, pero hay algunos que concentran a un público más minoritario y que tienen unos precios muy difícilmente rentabilizables. Las cifras son disparatadas muchas veces y hay otras cifras que desde el punto de vista del negocio sólo se soportan en papel.

P: RTVE se ha hecho con los derechos de la selección española para los partidos clasificatorios para la Eurocopa 2016 de Francia y el Mundial 2018 de Rusia. ¿Cómo ve que el ente público entre en esa puja?

R: Sorprende que entren en la puja por unos derechos tan caros sabiendo además que había otras cadenas en abierto dispuestas a darlo. Creo que TVE tiene un papel muy bonito que hacer con los deportes y derechos: potenciar realmente el deporte de base y el que no tiene tanta demanda de audiencia. Por ello sorprende una inversión tan alta.

No conozco los detalles y no quiero juzgar alegremente. A lo mejor si me lo explican bien, resulta que es una inversión más sabia de lo que parece a primera vista. Pero desde fuera y sin tener todos los datos, sí es algo que sorprende.

P: Ve necesaria una transición de la televisión en abierto a la de pago ¿Cree que el público español está preparado para este salto?

R: Para un salto radical e inmediato, sería muy aventurado decir que sí. Creo que el pago y el abierto deberían coexistir y no porque el pago vaya a más, deba suponer la supresión total de la televisión en abierto. Ahora bien, sí pienso que el pago va a ofrecer cosas que la televisión en abierto no va a poder ofrecer, y debería haber una transición natural al pago para aquellos usuarios que quieran tener una experiencia televisiva más rica y más interesante.

España es un país con muchas horas de consumo televisivo y que ese consumo sea de más calidad, con contenidos mejores y más cuidados, es algo que puede ofrecer el pago. En el momento en que haya una oferta más amplia, las ofertas serán más baratas y el precio dejará de ser una barrera para mucha gente y, por lo tanto, sí debería haber una transición hacia una televisión de pago con más penetración.

P: ¿Qué repercusiones tendrá el reciente cierre de 9 canales de TDT?

R: Es muy pronto para decirlo pero al haber menos canales en abierto, obviamente habrá gente que empiece a ver la televisión de pago como una alternativa más interesante. Hasta ahora, con el sistema que teníamos, ni ha funcionado especialmente el abierto ni ha funcionado especialmente bien el pago.

En el abierto no hay más que ver los números de TVE o de otros grupos pequeños como los de Vocento o Unidad Editorial, que están sufriendo. Parece que sólo Mediaset y Atresmedia tienen el volumen y la importancia suficiente para generar ingresos publicitarios que les permitan llevar un negocio viable.

P: ¿Cree que la compra de Canal + por parte de Telefónica a Prisa provocará una posición de monopolio en el sector?

R: Lo primero es que la operación tiene que analizarla Competencia (...) Lo que está claro es que si sale adelante sí tendrá una posición dominante porque sólo en cuota de mercado va a copar dos tercios de toda la televisión de pago, con lo que va a tener un poder importante de negociación a la hora de comprar derechos y demás.

Esto es una reflexión muy rápida y muy fácil. Se puede producir una posición de dominio que, sin embargo, no sea nociva para el mercado ya que las leyes de competencia impiden que se abuse de la situación de dominio, no que exista. Si Competencia decide que esa posición de dominio, con una serie de condiciones, no presenta un riesgo para el mercado, entonces puede ser beneficioso para todos.