Pekín.- Las economías de Asia crecerán un 7,5 por ciento en 2010, estimuladas sobre todo por los aumentos del PIB de China (del 9,6 por ciento) y la India (8,2 por ciento), según las predicciones del Banco Asiático de Desarrollo (BAD) hechas públicas hoy en Pekín y otras ciudades asiáticas.
Para el año 2011, se espera que el ritmo se ralentice y las economías estudiadas por el BAD (todas las de Asia exceptuando Oriente Medio y Japón, además de las islas del Pacífico) crezcan un 7,3 por ciento.
Los crecimientos "se apoyan en una modesta recuperación del comercio internacional y los efectos de las políticas de estímulo fiscal y monetario", destacó el informe, que espera que en 2011 se reduzca el alcance de los planes estatales de lucha contra la crisis.
Por regiones, el BAD predice que la del este asiático será la que más rápido aumente (un 8,3 por ciento en 2010 y un 7,7 en 2011), lográndose además que las tres economías de la zona que experimentaron crecimiento económico negativo en 2009 (Hong Kong, Mongolia y Taiwán) reviertan la tendencia ya este año.
En este grupo destacan las previsiones para China del BAD, que espera un crecimiento de la tercera economía mundial del 9,6 por ciento en 2010 y del 9,1 por ciento en 2011, muy por encima de las prudentes metas del Gobierno chino (que se ha fijado un 8 por ciento para este año).
El BAD apuntó en su informe que China tuvo unas políticas muy acertadas en 2009 para hacer frente a la caída de las exportaciones y otros efectos de la crisis, pero advierte que en 2010 la tercera economía mundial continúa enfrentando riesgos.
Entre ellos, destacó el banco, una política de créditos excesivamente flexible podría aumentar el riesgo de recalentamiento, y además "si el país no cambia su estructura económica, ésta podría perjudicarle a medio y largo plazo", en alusión a que China debe aprender a depender más de su consumo interno.
El BAD recomendó a China en este sentido que desarrolle más el sector de los servicios, aumente la movilidad de los trabajadores, liberalice el sector financiero y permita cierta fluctuación del yuan con respecto al dólar, algo que Washington lleva meses pidiendo.
Fuera de China, el BAD también prevé un fuerte aumento del PIB (7,4 por ciento en 2010 y 8 por ciento en 2011) en la región del sur de Asia, impulsada por la otra potencia emergente del continente, la India.
India tendrá, según las previsiones del BAD, un crecimiento del PIB del 8,2 por ciento en este año y del 8,7 por ciento en el próximo.
Otra región muy decisiva para el desarrollo del continente, el sureste asiático, crecerá según la previsión un 5,1 por ciento en 2010 (después de haberlo hecho sólo en un 1,2 por ciento en 2009).
Los cinco países de esa región que el pasado año tuvieron crecimiento negativo (Brunei, Camboya, Malasia, Singapur y Tailandia) obtendrán cifras positivas, siempre según el BAD.
De hecho, el único de los 45 países y regiones estudiados por el informe del BAD que todavía mantendrá crecimiento negativo en 2010 serán las Islas Fiji (-0,5 por ciento), mientras que el próximo año todos ofrecerán resultados positivos.
El informe prevé una inflación media en torno al 4 por ciento en el continente, y destacó que los países de la región deben "restaurar la prudencia fiscal y monetaria".
En el documento también se destaca que "una excesiva intervención en los mercados de divisas debería reducirse, promoviendo mayor flexibilidad en las tasas de cambio", en otro aparente mensaje a China para que vuelva a permitir cierta fluctuación del yuan con respecto al dólar, tras año y medio sin apenas variaciones.
Antonio Broto
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