El banco de españa dice que la economía "todavía no ha despejado sus incertidumbres" por la exposición al ladrillo

El Banco de España afirma que la coyuntura general de la economía "sigue siendo difícil", ya que "no ha despejado sus incertidumbres, por la exposición al sector de construcción y promoción inmobiliaria y por la situación de los mercados de financiación internacionales".
En su último Informe de Estabilidad Financiera, correspondiente a octubre de 2010, el regulador destaca la necesidad de asentar la reestructuración de las cajas de ahorros y llevar a término las reformas económicas estructurales y el programa de consolidación fiscal.
"Todas estas cuestiones son imprescindibles para recuperar la confianza", indica el organismo que gobierna Miguel Ángel Fernández Ordóñez.
Según el Banco de España, el sector bancario "seguirá sometido a elementos de presión mientras que no se recupere plenamente la confianza de los inversores y mientras que la economía española no retorne a una senda de crecimiento".
Los datos del regulador indican que la inversión "potencialmente problemática" del sector bancario en construcción y promoción inmobiliaria alcanzó al cierre del primer semestre los 181.000 millones de euros, lo que supone un incremento del 9% en comparación con diciembre de 2009 (166.000 millones).
En todo caso, en el conjunto del crédito los ratios de dudosos amortiguan su ritmo de aumento.
Sobre la evolución que se prevé del crédito, subraya que es "probable" que siga a la baja, pues es "consecuencia natural de un proceso de ajuste de las familias y de las empresas tras el aumento de su endeudamiento durante los años previos a la crisis".
Por otra parte, en cuanto a la deuda de las administraciones públicas, subrayó que se desacelera, aunque "sigue creciendo a un ritmo elevado".
CAIDA BENEFICIOS
En otro orden de cosas, el Banco de España señala que las entidades de depósito españolas redujeron su resultado atribuido un 18,5% en la primera mitad del ejercicio, en comparación con el mismo periodo de 2009.
En este sentido, el organismo afirma que las entidades deberán “intensificar” los esfuerzos en la contención de costes operativos para amortiguar el impacto de los “factores negativos” en sus cuentas de resultados.
Así, subraya que “tendrán que establecer fórmulas para reforzar la generación de ingresos e intensificar sus esfuerzos de contención de costes”.
Según el Banco de España, estos esfuerzos “ya se vienen observando en los últimos trimestres” pero considera necesario que las entidades los intensifiquen.
También destaca la reducción progresiva del número de oficinas iniciada a mediados del año pasado, pero advierte de que “esta tendencia no es homogénea para todas las entidades”.
No obstante, aclara que estas diferencias se deben, “no sólo a los distintos ritmos de cada una de las entidades, sino también a que no todas tienen las mismas necesidades de reabsorción de los excesos de capacidad instalada”.