El déficit estatal sigue bajando y será menor del previsto según el Gobierno

Madrid.- La mejora de los ingresos impulsada por las subidas impositivas y por las medidas de ajuste tomadas este año siguen permitiendo la reducción del déficit del Estado, que según el Gobierno cerrará el año cumpliendo "con holgura" con lo previsto, es decir, posiblemente por debajo del 6,7% del PIB calculado.

El saldo negativo de la Administración central se redujo hasta noviembre un 45,8% con respecto al mismo periodo de 2009, y se situó así en el 3,68% del PIB.

Aunque en diciembre se contabilizan buena parte de los gastos, y más este año en el que las medidas de ajuste han obligado a reprogramar actuaciones y a que la ejecución del presupuesto sea más lenta, el Gobierno está convencido de que se cerrará el año con un saldo negativo menor del inicialmente previsto y de que el proceso que bajar a un déficit del 3% del PIB en 2013 está encauzado.

Así lo sugirió el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, quien aseguró que se va a cumplir "con holgura" con el objetivo de déficit del Estado para este año -del 6,7% del PIB- y se podrá así incluso "compensar" si hay desviaciones en la ejecución de otras administraciones.

Ocaña no quiso decir en qué administraciones podrían producirse dichas desviaciones, aunque la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, aseguró ayer que el objetivo de déficit de las comunidades va a cumplirse, con lo que los peores datos podrían salir de la Seguridad Social o de los ayuntamientos.

De momento, la Seguridad Social registró un 25% menos de superávit hasta noviembre, con 11.100,62 millones de euros de saldo positivo que suponen el 1,05% del PIB.

El conjunto de las administraciones públicas -Estado, comunidades autónomas, ayuntamientos y Seguridad Social- tienen que acabar con un déficit del 9,3% del PIB según lo comprometido por el Gobierno para este año.

Este año era "el más difícil" para cumplir con los objetivos de déficit y se va a conseguir, según subrayó Ocaña, quien por esa razón se mostró seguro de que se va a reducir saldo negativo del conjunto de las administraciones al 3% del PIB en 2013 como exige la Comisión Europea.

Admitió, no obstante, "todavía tendremos que seguir apretándonos el cinturón" y, junto con la austeridad, hay que seguir impulsando las reformas estructurales prometidas para "ganar confianza", y conseguir que "los mercados se normalicen" y la economía consolide su crecimiento.

La reducción del déficit se está logrando sobre todo por la mejora de los ingresos impositivos, que han subido el 11,1% en este periodo por las medidas fiscales tomadas por el Gobierno.

El efecto neto de estas medidas ha sido tal que ha supuesto ingresos adicionales por 5.650 millones de euros, según los datos facilitados por Ocaña.

Esto ha sido posible con la subida del IVA y de los impuestos especiales, la desaparición de la deducción de 400 euros en el IRPF y el aumento de las retenciones fiscales a las rentas de capital, pero también por las menores devoluciones por IVA en comparación con el mismo periodo del año anterior.

El positivo impacto sobre los ingresos se ha visto atenuado, no obstante, por otras medidas que han operado en sentido contrario, como las menores retenciones del trabajo por la rebaja de los salarios públicos o el efecto que ha tenido la reducción del tipo impositivo en sociedades e IRPF por mantenimiento o creación de empleo.

Al analizar los efectos de la subida del IVA, Ocaña admitió que "es posible que hubiera un moderado adelanto de las compras", sobre todo de los bienes de consumo duradero, antes del alza de este impuesto, pero insistió en que después "el consumo se ha mantenido" y el aumento de la recaudación por este impuesto está "en línea con las previsiones" del Ejecutivo.

Ocaña subrayó, por otra parte, que este año no ha habido gasto del Estado destinados pagos del Estado ni al Fondo de Adquisición de Activos Financieros (FAAF) ni al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

En este sentido, aseguró las medidas puestas en marcha a finales de 2008 para ayudar al sector financiero -a través del FAAF la concesión de avales públicos- "no han costado dinero al contribuyente".

Por el contrario, subrayó que, a mes de noviembre, el Tesoro ha ingresado 2.114 millones de euros correspondientes a la primera devolución de aportaciones al FAAF y además hasta la fecha se han ingresado casi 3.000 millones de euros por los intereses de ese fondo.