Lisboa, 20 sep.- El Gobierno conservador luso salió hoy al paso de los rumores que apuntan a que el país necesitará de un segundo rescate y confió en que Portugal no recurra a un nuevo programa internacional porque cumplirá con todos sus compromisos.
El ministro adjunto a la Presidencia del Ejecutivo portugués, Miguel Poiares Maduro, explicó en declaraciones a los periodistas que el país debe centrarse en concluir con éxito el plan de ajustes acordado con la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), cuyos fondos dejará de recibir a partir de junio de 2014.
"Desde el punto de vista del compromiso del Gobierno se ha hecho todo, y eso nos coloca en condiciones de no precisar de un segundo rescate", subrayó Poiares Maduro.
El aumento de la presión sobre la deuda pública de Portugal mantiene los intereses que penalizan sus títulos a diez años en el mercado secundario -donde se compran y venden las obligaciones adquiridas en subasta pública- por encima de la barrera del 7 %, lejos del 5,5 % que rondaban hace apenas unos meses.
Analistas y expertos observan el mercado secundario como referencia para prever el resultado de futuras emisiones de deuda a largo plazo, y coinciden en que la rentabilidad exigida por los inversores para comprar títulos lusos continúa siendo demasiado elevada y debe bajar más para que el país sea capaz de financiarse a intereses sostenibles.
Mientras el debate crece, la troika prosigue con su visita a Lisboa, que se inició el pasado lunes y tiene por objetivo evaluar el cumplimiento del programa de ajustes pactado con las autoridades lusas.
Las conversaciones entre el Ejecutivo luso y los técnicos de la UE y el FMI se centran en una reforma del Estado que prevé la salida de funcionarios y cambios en el sistema de pensiones, así como una posible flexibilización de la meta de reducción del déficit para 2014, entre otros asuntos.
En este sentido, el ministro adjunto a la Presidencia aseguró que el Gobierno defiende "de forma fuerte y efectiva" los intereses del país, frente a las voces que lo acusan de no contestar las medidas de austeridad que le exigen los organismos internacionales.
"Tenemos claro que la consolidación presupuestaria debe hacerse de forma que se minimicen los costes sociales", apuntó Poiares Maduro.
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