Barcelona, 27 ene.- El presidente de los Reguladores de la Unión Europea (CEER), lord John Mogg, ha recordado la capacidad de cada país europeo de organizar sus propios organismos reguladores y no ha puesto pegas al modelo español de regulador único, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
En declaraciones a los periodistas, Mogg, que ha participado hoy en el Simposio Empresarial Internacional sobre Innovación y Sostenibilidad Energética en el Parc Científic de la UB en Barcelona, se ha referido así a la CNMC, que ha absorbido siete organismos supervisores, entre ellos la CNE (Comisión Nacional de la Energía).
Preguntado por la bondad del modelo español, Mogg ha asegurado que no entraba en opinar si es bueno o malo, aunque ha afirmado que países como Holanda o Alemania tienen un modelo similar.
Ha recordado que la normativa europea solo obliga a tener un regulador en materia energética, y que la competencia sobre el modelo de regulación de todos los sectores económicos afectados es de los Estados.
En este sentido, ha afirmado que lo básico para determinar el buen funcionamiento de la CNMC es el presupuesto y la independencia del ejecutivo, cuestiones que no ha querido entrar a valorar.
No obstante, ha asegurado que recientemente se reunió con los máximos responsables del regulador único, que preside José María Marín Quemada, y quedó impresionado por su total compromiso con las directrices de política energética de la Unión Europea.
Por otra parte, ha opinado que no ve factible en un futuro inmediato que haya un regulador europeo de la energía, dada la resistencia de los Estados miembros a ceder competencias en esta materia y a la diversidad de situaciones de cada país.
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