El SEPLA quiere acabar con la incertidumbre y caos en el colectivo de pilotos

Madrid 1 dic.- Decidida a terminar con "una situación de incertidumbre y caos por la crisis y la reforma laboral" la nueva Junta Directiva del SEPLA inicia una andadura de cuatro años en la que espera que los pilotos recuperen el orgullo de pertenecer a un sindicato que "está muy denostado".

Esta es la intención del nuevo equipo capitaneado por Javier Martínez de Velasco que representa a 5.500 pilotos "con derecho a voto" y a otros 3.000 que se han tenido que ir a trabajar fuera de España.

Martínez de Velasco cree que se ha vulnerado el espíritu de la reforma laboral y se ha optado por reducir las aerolíneas, "sin tener necesidad, para hacerlas más rentables recurriendo al despido generalizado para, después, hacer nuevos contratos más baratos".

Lo ha dicho en una entrevista con Efe en la que ha asegurado que esto ha creado "gran incertidumbre" en el colectivo, que siente que ha cedido una serie de derechos laborales a cambio de una seguridad, "que luego le han arrebatado de golpe y ya no se fían".

"Ya no quieren promesas de futuro, porque estas se incumplen y hay que ir a los tribunales", ha dicho Martínez de Velasco, al relatar que se ha creado una práctica ilógica y no funcional", que no se hace en otros países.

Por eso, el SEPLA quiere alinearse con los sindicatos europeos y estadounidenses, que aconsejan a las empresas "en el terreno técnico y legal para salir adelante" en vez de estar en un "vamos a la guerra continuo".

Aunque reconoce que entre los pilotos el paro no alcanza los niveles de otros colectivos "porque se van de España", denuncia que hay "muchos empleados de baja calidad", como sucede en Ryanair.

"Te contrata un broker en una empresa de baja calidad y cobras por vuelo", creándose una situación que repercute en la operativa y en la seguridad porque "no sabes si vas a trabajar mañana".

El SEPLA también quiere borrar la imagen de que el piloto "es un señorito con prebendas" y destaca que "son trabajadores a sueldo como el resto de la sociedad" y en la defensa de sus condiciones laborales demandan "cosas lógicas", mientras resalta que son los garantes de la seguridad.

"Cuando yo me bajo de un avión, lo estoy haciendo por seguridad y no por capricho", ha asegurado mientras lamentaba que sus decisiones no sean entendidas a veces por los pasajeros.

En este sentido, ha recordado la labor desarrollada por el SEPLA para que la nueva normativa europea sobre actividad y descansos de las tripulaciones se redactara de acuerdo a criterios científicos de prevención de fatiga.

El sindicato cree que esta ley tiene "aún muchos agujeros negros" y ha criticado que algunas aerolíneas, como es el caso de Air Europa "no entiendan que por seguridad no se puedan hacer mas de 100 horas de vuelo en 28 días".

Para hacer valer sus derechos, Martínez de Velasco considera primordial participar en las organizaciones europeas y en las instancias donde se toman las decisiones sobre normativa de trabajo y descanso, funcionamiento de las compañías o aspectos técnicos, como sucedió con los grupos de trabajo sobre el efecto de las cenizas volcánicas en la aviación.

Cree que en España se ha avanzado mucho en la relación con Fomento y calificó de "fundamental" la colaboración con el Ministerio porque este "tiene profesionales de la gestión de la ley, pero nosotros somos los que estamos dentro gestionando la operación y la seguridad".

Destacó el trabajo realizado, con el apoyo de los controladores, para reducir los retrasos en el aeropuerto de Barajas, donde se ha incrementado el tiempo de las escalas y se han modificado los rodajes, entre otros aspectos.

Un catálogo de propósitos para cuatro años en los que quiere que los pilotos recuperen el orgullo de pertenecer a "una asociación como el SEPLA", que "en España está muy mal vista por lo que incluso te pagan más si estás fuera de ella".