Francia quiere armonizar con Alemania la fiscalidad sobre las empresas

  • El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, subrayó hoy su intención de "armonizar" la fiscalidad que soportan las empresas con la de Alemania para justificar las rebajas de cotizaciones patronales anunciadas y la reforma impositiva que va a llevar a cabo su Gobierno.

París, 16 ene.- El primer ministro francés, Jean-Marc Ayrault, subrayó hoy su intención de "armonizar" la fiscalidad que soportan las empresas con la de Alemania para justificar las rebajas de cotizaciones patronales anunciadas y la reforma impositiva que va a llevar a cabo su Gobierno.

"Nos tenemos que armonizar con Alemania", señaló Ayrault en una entrevista a la emisora de radio France Inter al ser preguntado sobre si también contempla una rebaja del impuesto de sociedades.

Previamente, había insistido en que las cotizaciones que graban el trabajo "son mucho más elevadas en Francia" que en Alemania y que el impuesto de sociedades "es también mucho más elevado en Francia que en Alemania".

El primer ministro socialista recordó que con las medidas que puso en marcha su Ejecutivo el pasado año, "el costo del trabajo" va a bajar este año un 4 % y un 6 % en 2015.

A eso se viene a añadir el anuncio hecho por el presidente de la República, François Hollande, el martes de que las cotizaciones patronales para financiar las prestaciones familiares van a desaparecer a partir del año próximo, dentro del "pacto de responsabilidad" que lanzó a la patronal.

Ayrault se felicitó del compromiso de la nueva coalición de Gobierno en Alemania para crear un salario mínimo general -"va en el sentido del progreso"- porque su ausencia "era un factor de distorsión de competencia" entre los dos países.

Interrogado sobre las contrapartidas en términos de una cifra de creación de empleos que esperan de los patronos con ese "pacto de responsabilidad", respondió que "las cosas no se plantean así".

"Una empresa no es una administración", explicó antes de descartar sanciones contra los sectores que no generen empleos a cambio de las disminuciones de cotizaciones: "no estamos en una economía administrada".

Señaló que para los franceses no se trata de "ayudar a los patronos, sino de ayudar a las empresas para que tengan margen de maniobra para poder invertir, innovar y crear empleo".

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