Madrid, 11 mar.- La Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) se ha sumado hoy al optimismo de otras instituciones y organismos sobre la economía española y ha elevado su previsión de crecimiento del PIB de este año al 1,2 %, en tanto que ha rebajado la estimación de la tasa de paro hasta el 25,1 %.
Se trata de una "recuperación suave", en palabras del director, Carlos Ocaña, sustentada en tres factores: un mejor acceso al crédito para empresas y familias que se irá haciendo más visible, la evolución positiva del turismo debido a los problemas geopolíticos de países rivales en este sector y un menor ajuste fiscal.
Así, sube dos décimas la previsión de crecimiento de PIB hasta el 1,2 % -por encima del 1 % que espera el Gobierno- y en línea con lo que anunció también ayer la CEOE.
Con las variables conocidas hasta ahora, Funcas opina que el crecimiento en el primer trimestre del año estará cerca del 0,4 %.
Para 2015 la fundación prevé que la economía gane impulso y crezca un 1,8 %.
Del lado de los factores que limitarán el crecimiento económico se encuentran el sobreendeudamiento de empresas y familias, lo que reduce su desarrollo y consumo, y del sector público, lo que perjudica su capacidad de gasto.
La previsión es que la deuda pública se sitúe en el 99,7 % del PIB en 2014 y en el 104,3 % en 2015.
A juicio del organismo, aunque todavía no puede hablarse de final de la crisis económica debido a las altas tasas de paro, "la gran sorpresa" ha sido precisamente una evolución del desempleo mejor de lo esperado.
De este modo, las cifras de los últimos meses de 2013 y primeros de 2014 han llevado a una revisión al alza de las previsiones para este ejercicio, en el que se prevé un incremento de la ocupación del 0,5 %, y del 1,1 % en 2015.
Para Funcas, en 2014, por primera vez desde 2007, volverá a crearse empleo neto.
También mejoran tres décimas las previsiones referidas a la tasa del paro, que se situará este año en el 25,1 % y en el 23,5 % en 2015.
Esto se traduce, ha explicado el director de coyuntura y estadísticas, Ángel Laborda, en que en los próximos dos años va a bajar en 900.000 personas el número acumulado de parados, de los que 400.000 provendrán del aumento del empleo y los otros 500.000 del descenso de la población activa.
En términos de Encuesta de Población Activa (EPA), se crearían unos 155.000 empleos en 2014 y otros 240.000 en 2015.
En lo que se refiere a los salarios, a juicio de Laborda van a seguir "prácticamente congelados durante bastante tiempo", ya que debe recuperarse todavía una pérdida de competitividad "muy fuerte" que se produjo en los años anteriores a la crisis, cuando los sueldos crecían por encima de la media.
Además, tanto Ocaña como Laborda han abogado por bajar las cotizaciones a la Seguridad Social "de forma general y significativa" pero "muy gradual" para estimular la creación de empleo, y compensar la caída de ingresos del sistema con una subida del IVA y otros impuestos indirectos.
Según Laborda esta medida sería mucho más efectiva que la que ha puesto en marcha el Gobierno de una tarifa plana de cotizaciones de 100 euros al mes durante dos años, que a su juicio tendrá un efecto de sustitución y no servirá para crear empleo neto.
Por otro lado, según Funcas la actividad inmobiliaria seguirá siendo un lastre para la recuperación hasta, al menos, la segunda mitad de 2015.
En 2014, y por primera vez desde 2007, se espera que la demanda interna registre tasas positivas con un crecimiento del 0,7 %, que se acentuará en 2015 con un incremento del 1,2 %.
El consumo privado aumentará suavemente, mientras que el consumo público moderará su ritmo de ajuste.
La inversión en construcción residencial seguirá siendo negativa este año y se estabilizará a mediados del próximo, mientras que la construcción no residencial, debido al incremento de la licitación pública, ha sido revisada al alza 6 puntos porcentuales en 2014, y registrará tasas positivas ya en este ejercicio.
En bienes de equipo la inversión crecerá impulsada por la necesidad de las empresas de reponer el capital productivo depreciado y por el aumento de la actividad en el sector exterior.
En cuanto a la previsión del saldo exterior, se ha rebajado en 2014 debido al menor crecimiento estimado de las exportaciones y al aumento de las importaciones, así como el peor estado económico de los países emergentes.
En otro orden de cosas, Laborda ha insistido en que opinan que el déficit público de 2013 se desviará de manera poco significativa y cerrará en un 6,8 % del PIB, no en un 6,5 % como había comprometido el Gobierno.
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