Gobierno ve superadas barreras para un reparto más justo de la pesca en la UE

  • España ha logrado romper "barreras políticas" en el acuerdo sobre la reforma pesquera, lo que permitirá un reparto más justo de las cuotas y que la flota nacional pueda aprovechar especies que antes capturaba y no podía llevar a puerto, según el secretario general de Pesca, Carlos Domínguez.

Madrid, 2 mar.- España ha logrado romper "barreras políticas" en el acuerdo sobre la reforma pesquera, lo que permitirá un reparto más justo de las cuotas y que la flota nacional pueda aprovechar especies que antes capturaba y no podía llevar a puerto, según el secretario general de Pesca, Carlos Domínguez.

Domínguez ha manifestado, en una entrevista con Efeagro, que el compromiso alcanzado por los ministros de Pesca de la Unión Europea (UE) sobre la revisión de la Política Pesquera Comunitaria (PPC) significa logros "que eran inconcebibles" al principio de la negociación.

El Consejo de ministros de la UE ha pactado esta semana medidas contra los descartes (capturas no deseadas de peces que después, muertos, son arrojados al mar) y España valora que el calendario y la forma de aplicación sean más flexibles.

El compromiso, que aún debe ser negociado con el Parlamento Europeo (PE), impone a los pescadores descargar obligatoriamente sus capturas en los puertos a partir de un calendario, según el tipo de pescado, empezando en 2014 y con ciertos márgenes.

Por ejemplo, los barcos podrán descargar capturas de una especie para la que no tengan cuota, utilizando a cambio hasta un 10 % de los cupos que sí tienen asignados.

Esos márgenes van a posibilitar que barcos españoles dedicados a la merluza puedan llevar a puerto bacalao o eglefino, que hasta ahora caían en las redes accidentalmente y tenían que descartar "automáticamente".

Domínguez ha señalado que se ha producido una "ruptura limitada" del llamado principio de estabilidad relativa, en el que se basa la distribución de las capturas y que restringe el acceso de barcos españoles a determinadas pesquerías; esta es una de las reivindicaciones de España en la reforma.

Según ha indicado, las medidas para reducir los descartes, que el Gobierno apoya, "no paralizarán la actividad pesquera".

Ha rechazado que se vayan a acortar los días de faena, pues habrá incentivos para adaptar los equipos de los barcos, y ha remarcado que la reforma "no será la causa de la reducción de la flota española".

También ha negado que haya resistencia a la reforma: "Solo queremos que sea más realista".

Sobre la necesidad de ajustes en la flota española, Domínguez ha afirmado que "desgraciadamente lleva muchos años en proceso de adaptación"; en 15 años han disminuido los barcos un 40 %", pero en algunos segmentos "podría darse ese paso para que la actividad pesquera fuera más previsible".

"Nosotros vamos a apoyar a las empresas que quieran voluntariamente afrontar ese reto para darles una salida (como ayudas a la paralización), pero no es nuestra prioridad; la prioridad es que la flota siga pescando", ha insistido.

Respecto a las negociaciones con Marruecos, el Gobierno "tiene claro" que la próxima ronda con la UE será la última y ha mostrado su esperanza en la visita que el presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso, hará a ese país este fin de semana.

Preguntado por obstáculos como la situación del Sahara occidental o la compensación financiera que pide Rabat, Domínguez ha remarcado que Bruselas "está haciendo un buen trabajo" para superarlos y evitar el veto posterior del Parlamento Europeo.

En relación a las movilizaciones de esta semana en puertos de Galicia (como Lugo o Coruña) en protesta por la burocracia, Domínguez ha señalado que el Gobierno dialogará con el sector, pero tiene la obligación de que se respeten las normas: "Si alguien pretende que con presiones dejen de cumplirse está muy desencaminado".

En cuanto al "carné por puntos", ha confiado en que no suponga la retirada de licencias, ni la suspensión a capitanes o armadores.

En el caso de los acuerdos sobre el reparto de posibilidades pesqueras en el caladero nacional, ha valorado el pacto con la flota en el Golfo de Cádiz, que permitirá la distribución de la cuota de boquerón más "escalonada", para que no ocurra como en 2012, cuando en agosto se interrumpió la pesca.

Respecto al Cantábrico noroeste, ha subrayado la importancia de acordar un reparto más equitativo entre las distintas artes, si bien ha reconocido que quedan "en el tintero" cuestiones como una asignación de las cuotas de caballa por provincias, para que "no tengan que ir todos los barcos a Francia".

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