Juez rechaza pedir los correos de otros imputados por la compra Banco Florida

  • La juez Leticia García, que investiga al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa por la compra del City National Bank de Florida, ha rechazado requerir a Bankia los correos corporativos del resto de querellados en esta causa porque, como ocurrió con aquel, se trata de una medida "absolutamente desproporcionada".

Madrid, 21 mar.- La juez Leticia García, que investiga al expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa por la compra del City National Bank de Florida, ha rechazado requerir a Bankia los correos corporativos del resto de querellados en esta causa porque, como ocurrió con aquel, se trata de una medida "absolutamente desproporcionada".

En un auto, al que ha tenido acceso Efe, la sustituta de Elpidio José Silva en el Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid desestima así la petición que le hizo el sindicato Manos Limpias para que incorporara los correos desde enero de 2008 a diciembre de 2010 de otros siete exdirectivos y exejecutivos de la caja, precisando que no reclamara los de Blesa por estar ya aportados a la causa.

Se trata de la mano derecha de Blesa, Ildefonso Sánchez Barcoj, el exdirector de desarrollo internacional e inversiones especiales, Rafael Sánchez Lozano y los exejecutivos Matías Amat, Juan Bartolomé, Gonzalo Alcubilla, Fernando Sobrini y Luis Crespo.

Todos ellos, además de la Fiscalía, se opusieron a la intervención de sus correos.

En este sentido, la magistrada Leticia García acoge sus criterios y recuerda que la Audiencia Provincial, que anuló la causa por la que Silva investigaba la concesión de un crédito de 26,6 millones de euros al Grupo Marsans, consideró que "para esclarecer los hechos no era preciso en ningún caso la intervención de las comunicaciones telefónicas y telemáticas" de Blesa.

Y ello porque suponía una "intromisión en los derechos fundamentales del imputado".

También explica que el Tribunal Constitucional ha concluido que el secreto de las comunicaciones "no puede ser desvelado para satisfacer la necesidad genérica de prevenir o descubrir delitos o para despejar sospechas sin base objetiva que surja a los encargados de la investigación, por más legitima que sea esta aspiración".

La juez critica que la acusación pidiera esta prueba "genéricamente, sin especificar el objetivo ni el interés de la medida interesada".

Además, explica al sindicato que esta medida "conculca el principio de excepcionalidad, ya que la peculiar naturaleza de este tipo de negocios jurídicos provoca que dejen, en momentos anteriores, coetáneos y posteriores un amplio rastro documental, tanto en los archivos de las entidades afectadas, como en las instituciones" que controlan la actividad financiera.

En todo caso, tal y como determinó la Audiencia madrileña, la juez señala que la intervención de los correos de Blesa se hizo sin que concurriesen "los presupuestos necesarios" para justificar "tal limitación de derechos y tal injerencia indiscriminada en el patrimonio y persona de los imputados", no son "pertinentes" y "son absolutamente desproporcionadas para el objeto de la investigación.

Por otra parte, la magistrada, que esta semana archivó las actuaciones respecto a Sobrini, Crespo, Bartolomé y Alcubilla, deberá pronunciarse sobre la solicitud que, en este sentido, le ha trasladado también el exdirector de Negocio Matías Amat.

En su escrito, al que ha tenido acceso Efe, el exdirectivo sostiene que, al igual que los cuatro anteriores, no pertenecía al Consejo de Administración de Caja Madrid, ni era miembro de su Comité de Inversiones, por lo que no ha tenido "ninguna participación en los hechos".

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