La Caja de Canarias niega rotundamente cualquier irregularidad en sus cuentas

Las Palmas de Gran Canaria, 11 jul.- La Caja de Canarias ha negado hoy "rotundamente" que sus cuentas de los ejercicios de 2008, 2009 y 2010 presentaran irregularidad alguna y ha recordado que las de 2011 se aprobaron en marzo de este año por "deber legal", antes de conocer el resultado de la auditoría sobre la matriz de Bankia

La Caja Insular, una de las siete entidades que constituyeron Bankia, publica hoy en los diarios "Canarias 7" y "La Provincia" sendos comunicados en los que rechaza, aunque sin citarlo, las manifestaciones realizadas por el presidente de su Comisión de Control hasta el pasado 23 de abril, José Ramón Durán Alday.

Este exdirectivo ha asegurado en los dos últimos días que advirtió hasta tres veces al Banco de España de que las cuentas de La Caja de Canarias no reflejaban su situación real e, incluso, se ha dirigido por escrito a la Fiscalía Anticorrupción para pedir que se investiguen seis posibles delitos en la gestión de la entidad.

"Las cuentas de los ejercicios 2008, 2009 y 2010 a los que se hace referencia en diversos artículos de prensa cuentan con informes de auditores externos sin salvedades y con informes de la Comisión de Control que no reflejaron irregularidad de ningún tipo", replica La Caja de Canarias en su comunicado de respuesta.

Además, subraya que, cuando formularon sus cuentas de 2011, en su caso el pasado 30 de marzo, "ni La Caja de Canarias ni el resto de cajas que integran el grupo Bankia disponían del informe de auditoría del Banco Financiero y de Ahorros, SA", la sociedad matriz de Bankia.

"Una vez conocido por La Caja de Canarias el informe de auditoría del Banco Financiero y de Ahorros, SA, así como la valoración de la participación de las cajas en dicho banco una vez materializada la conversión de las participaciones preferentes del FROB en acciones, el Consejo de Administración de la entidad, en cumplimiento de su deber legal, reformuló el pasado 2 de julio sus cuentas anuales de 2011, que próximamente someterá a su Asamblea General", añade.

La Caja de Canarias considera que algunas "manifestaciones irresponsables" sobre su estado financiero pueden estar causando "alarma social", pero recalca que la entidad está "tranquila para, en su caso, afrontar una investigación judicial de su gestión y que permita clarificar lo acontecido, para lo cual prestará su máxima colaboración con las autoridades judiciales y/o administrativas que así lo soliciten".