La empresa en la que se robaron fuentes radiactivas afirma que no suponen riesgo

  • Madrid.- La dirección de la empresa Aplicaciones Tecnológicas de Pozuelo de Alarcón (Madrid) en la que ha sido robada una caja con dos fuentes radiactivas de baja actividad ha afirmado que "no existe riesgo" para los ciudadanos, ya que las cantidades sustraídas son "muy pequeñas".

Madrid.- La dirección de la empresa Aplicaciones Tecnológicas de Pozuelo de Alarcón (Madrid) en la que ha sido robada una caja con dos fuentes radiactivas de baja actividad ha afirmado que "no existe riesgo" para los ciudadanos, ya que las cantidades sustraídas son "muy pequeñas".

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha informado hoy de la sustracción de este equipo, que según ha detallado "no entraña riesgos radiológicos mientras se mantenga íntegro y cerrado".

Se trata de una caja de 12 por 12 y por 15 centímetros perfectamente señalada como material radiactivo que contiene cesio-137 y californio-252.

El gerente de la empresa, José María Rodríguez, ha explicado a Efe que "no existe ningún riesgo" en caso de manipulación de las cajas, ya que contienen una cantidad "muy pequeña" de fuentes radiactivas, que además están bien protegidas.

"Se puede trabajar con ellas con las manos, no existe ningún riesgo", ha afirmado el gerente, que ha incidido en que se trata únicamente de "fuentes de chequeo", para comprobar equipos de radiación, y por lo tanto "no radian".

No obstante, el hecho de que no se consideren totalmente exentas de radiactividad obliga a informar al CSN sobre su existencia y, en su caso, sobre su sustracción.

Por eso la empresa comunicó inmediatamente su robo tras comprobar ayer, cuando unos empleados intentaron abrir la verja de entrada, que la cerradura había sido forzada y no podían acceder, por lo que avisaron a un cerrajero.

Una vez dentro comprobaron que una o varias personas habían sustraído tres cajas fuertes, una de ellas con documentos, otra con dinero y una tercera con las dos fuentes radiactivas.

Los ladrones sólo robaron estos efectos, por lo que la dirección de la empresa sospecha que conocían las instalaciones y lo que se guarda en ellas.

La empresa, que lleva unos diez años trabajando en Madrid y nunca había sufrido un robo, cuenta con las medidas de seguridad habituales de cualquier recinto, ya que "no son necesarias medidas especiales al no haber riesgo de radiación".

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