Barcelona, 15 nov.- La empresa química La Seda de Barcelona, que presentó concurso de acreedores en junio, perdió 215,91 millones de euros en los nueve primeros meses de 2013, tres veces más que hace un año, cuando sus números rojos fueron 70,6 millones.
En una comunicación enviada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la compañía ha explicado que continúa negociando una propuesta de convenio con sus acreedores, a los que plantea una quita inmediata del 86,8 % a cambio de cobrar de inmediato su deuda o bien una del 75 % y una espera de ocho años sin intereses.
Hasta el pasado 2 de octubre había conseguido el apoyo de un 25,2 % de la masa pasiva, pero necesita lograr al menos el respaldo de los propietarios de un 50 % de la deuda.
Entretanto, el administrador concursal tiene la autorización para vender las unidades productivas de Artenius España y de IQA.
Las pérdidas de explotación de La Seda hasta septiembre fueron de 170,3 millones de euros, de los que 123,8 millones se deben al test de deterioro de las filiales del grupo, entre otras razones.
En total, el grupo facturó 753,3 millones de euros hasta septiembre, un 19,1 % menos, que en el mismo período del año anterior, y el Ebitda consolidado fue negativo en 15,5 millones.
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