Atenas, 25 jul.- La "troika" internacional reinicia mañana, jueves, en Atenas sus contactos a nivel político con el Gobierno helénico para analizar las reformas y medidas de austeridad emprendidas hasta ahora por Grecia para seguir recibiendo ayudas.
Los responsables en Atenas deben presentar a los representantes de la Comisión Europea, del Banco Central Europeo (BCE) y del Fondo Monetario Internacional (FMI) una lista con medidas de recortes por un volumen de 11.600 millones de euros, para los años 2013 y 2014.
La primera cita de los expertos internacionales será con el nuevo ministro de Finanzas griego, Yannis Sturnaras, con que se reunirán a partir de las 8.00 GMT, mientras que el encuentro con el primer ministro, el conservador Andonis Samarás, está previsto para el viernes por la mañana.
El desembolso del próximo tramo de la ayuda internacional para Grecia -de 31.000 millones de euros- depende del informe que elaborará la troika, lo que no se espera antes de finales de agosto tras una nueva visita a la capital griega.
Para poder recibir estos fondo, vitales para evitar una bancarrota de Grecia, el país helénico debe recortar pensiones, ayudas sociales, así como transferencias a los ayuntamientos y presupuestos de ministerios.
El tejado para las pensiones, previsto inicialmente en 2.400 euros mensuales, se verá reducido hasta 2.000 euros.
Otros sectores afectados son la Salud pública, donde existen importantes retrasos en la reforma del sistema de abastecimiento de los hospitales, que en el pasado fue calificado por la "troika" como "tercermundista".
Otro tema de discordia entre el gobierno griego y los representantes de los acreedores son las privatizaciones.
Grecia ha prometido privatizar una serie de compañías públicas, como las de electricidad, de telecomunicaciones, y de gestión de aguas así que los puertos y los aeropuertos del país.
Pero las ventas de estas entidades no se han producido hasta ahora, en parte a causa de la burocracia de la administración pública y en parte por ausencia de inversores interesados.
La liberalización de una serie de profesiones es otra manzana de discordia entre Atenas y la "troika".
El Parlamento griego ha votado ya leyes para liberalizar las profesiones más controvertidas, como los taxistas, camioneros, farmacéuticos, abogados y notarios, pero los decretos para aplicar estos proyectos nunca han sido firmados.
La ausencia de progreso a las reformas prometidas ha contribuido a la perdida de credibilidad de los gobiernos griegos lo que ha provocado en los últimos días especulaciones -surgidas en Alemania- sobre una posible bancarrota y salida de Grecia de la zona euro.
En un esfuerzo de presionar más al gobierno griego y para ofrecerle el apoyo de la Comisión Europea, estará mañana en Atenas también el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Barroso, quien se reunirá con Samarás a las 14.30 GMT.
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