Lisboa, 16 may.- Los principales bancos portugueses acumulan fuertes caídas en Bolsa durante la última semana debido a los rumores y confirmaciones sobre posibles ampliaciones de capital tras cerrar el primer trimestre del 2014 con pérdidas.
El Banco Espírito Santo (BES) lidera el desplome con un retroceso del 22 % en los últimos cinco días, seguido de cerca por el Banco Comercial Portugués (BCP, participado por el Sabadell), que se dejó esta semana en torno a un 20 % de su valor.
No escapa a esta tendencia el Banco Portugués de Inversiones (BPI, cuyo principal accionista es el Caixabank), que perdió en las últimas cinco sesiones más de un 14 %.
Las tres entidades financieras presentaron recientemente los resultados de los tres primeros meses del año, con un perjuicio global de 234 millones de euros.
En el caso de las pérdidas, el líder fue el BPI, con 104,8 millones de euros, seguido por el BES, con 89 millones, y el BCP, con 40,7 millones.
Sin embargo, analistas lusos apuntan a la necesidad de los bancos de reforzar su capital como la verdadera razón que explica su brusco descenso en Bolsa.
De hecho, el BES ya anunció este jueves que pretende acometer una ampliación de capital de 1.045 millones de euros mientras que el presidente del BCP, Nuno Amado, se limitó a señalar el pasado miércoles que "no se ha tomado ninguna decisión" al respecto por el momento.
El negativo comportamiento de los bancos ha afectado al principal selectivo lisboeta, el PSI-20, que pasó de superar el martes los 7.400 puntos a caer por debajo de la barrera de los 7.000 en apenas tres días, en la que puede ser su peor semana de los últimos dos años.
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