Los grandes retos de Linde: sanear la banca y alejar la sombra de la política

Ana López Álvarez-Quiñones.

Madrid, 8 jun.- Alejar la sombra de la política de la Plaza de Cibeles, terminar de sanear la banca española y recuperar el buen nombre del Banco de España son los principales retos que marcarán desde el próximo lunes el trabajo del nuevo gobernador, Luis María Linde.

Este profesional, de 67 años, solo estará en el cargo tres años, dado que la Ley de Autonomía del Banco de España estipula como fecha de jubilación los 70 años.

La mayoría de los expertos consultados hoy por Efe alaban el perfil técnico y profesional del nuevo responsable de la institución frente a las críticas recibidas por su antecesor, el socialista Miguel Ángel Fernández Ordóñez.

Improvisación, precipitación y falta de consenso son algunas de las acusaciones que ha lanzado el sector financiero contra Fernández Ordóñez por su gestión de la grave crisis de la banca que aún no ha terminado y que, según dicen, él fue incapaz de anticipar.

Pero, sin duda, Fernández Ordóñez también será recordado porque su mandato marcó el inicio del fin del sector de las cajas de ahorros.

De estas centenarias entidades, creadas con la razón social grabada a fuego en su ADN, sólo quedan como tales las cajas de Ontinyent y Pollensa, tras ser obligadas todas las demás a agruparse y convertirse en bancos por la crisis del ladrillo y por culpa de un exceso de presencia política en sus órganos de gobierno.

En cuanto a las tareas pendientes de Linde, el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez, considera que la principal es la reestructuración del sistema bancario y la recapitalización de las entidades más débiles con el fin de "poner en valor el resto del sector que está injustamente estigmatizado".

Para este experto, "la doble recesión y la crisis del euro" han deteriorado las pérdidas de nuestras entidades y han complicado significativamente nuestro acceso a la financiación, por lo que parece inevitable que tengamos que acudir a la ayuda financiera externa, aunque está por definir su cuantía y funcionalidad.

Además, Díez considera que "si hay un programa de la troika" es muy probable que haya una nueva reforma financiera que obligará a las entidades a provisionar los créditos de empresas y familias.

Desde el sector se teme que la decisión de Bankia de sanear por anticipado los créditos al consumo y los concedidos a familias y empresas, incluso las hipotecas, obligue al resto de entidades a hacer lo mismo, para lo que necesitarían un "manguerazo" de capital, según fuentes financieras consultadas por Efe.

Y esto, según las fuentes, sólo podrá hacerse si se solicita el rescate europeo del sector de la banca, en ningún caso del conjunto de la economía.

Para el socio director de ATL Capital Félix López, si al final las entidades tienen que provisionar el resto de los créditos se estaría hablando de unos 60.000 millones euros como mínimo, lo que sólo podrían hacerlo los tres grandes, el resto tendrían que realizar ampliaciones de capital de tal magnitud que será difícil encontrar inversores dispuestos a poner esos importes.

En opinión del director de Estudios Financieros de la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS), Santiago Carbó, el saneamiento del sector financiero deberá ser "rápido y con máxima transparencia" para recuperar la credibilidad.

En cuanto al posible rescate bancario, Carbó considera "evidente" algún tipo de participación financiera europea, que juzga vital e inevitable y también le parece natural que no sea a cambio de nada y aboga por que se haga rápidamente y sin nuevos episodios.

Según otros expertos consultados por Efe, la prioridad para el nuevo gobernador es recuperar el prestigio institucional de la entidad, haciendo valer los recursos que tiene, fundamentalmente humanos, tanto en la labor inspectora/supervisora como en la de estudios.