Los "tories" prometen seguir recortando incluso si logran eliminar el déficit

  • El Partido Conservador británico seguirá ahorrando con recortes en el estado del bienestar y el gasto público incluso si logra eliminar el déficit presupuestario, lo que según su plan actual debería ocurrir en 2018, afirmó hoy el ministro de Economía, George Osborne.

Londres, 30 sep.- El Partido Conservador británico seguirá ahorrando con recortes en el estado del bienestar y el gasto público incluso si logra eliminar el déficit presupuestario, lo que según su plan actual debería ocurrir en 2018, afirmó hoy el ministro de Economía, George Osborne.

El "número dos" del Gobierno de David Cameron prometió que, de ganar las elecciones generales en 2015, se propondría generar un superávit en el presupuesto, a fin de reducir eventualmente la deuda neta acumulada.

"Puedo deciros hoy que, cuando hayamos resuelto el déficit (del anterior Gobierno) laborista, tendremos un superávit en los buenos tiempos como una forma de seguro frente a los malos", afirmó en su discurso ante el congreso "tory", reunido en Manchester (norte de Inglaterra) hasta el miércoles.

"Esto requerirá disciplina y control del gasto", aseveró Osborne, e indicó que, para garantizar las pensiones, el sistema sanitario y unas buenas Fuerzas Armadas, habrá que reducir el tamaño del Estado y "la factura de las ayudas sociales a las personas en edad de trabajar".

Osborne anticipó que, si se consiguiera ese ahorro, un futuro Gobierno conservador rebajaría los impuestos e invertiría en infraestructura necesaria para el país.

"Debemos comprometernos, junto con crear un superávit y reducir las ayudas sociales, a aumentar nuestras inversiones al menos en línea con nuestros ingresos nacionales", proclamó.

El llamado "chancellor of the Exchequer" argumentó que "no hay alternativa" a esta política económica, si se quiere evitar dejar un legado de deuda a futuras generaciones y "aprender las lecciones" de lo que considera los errores catastróficos del anterior Gobierno laborista.

"La crisis nos llevó al límite -dijo el ministro-. Si no reducimos nuestras deudas, la próxima podría empujarnos. Aprendamos de los errores que pusieron al Reino Unido en este estropicio".

"Prometamos: nunca más. Esta vez vamos a producir un superávit. Esta vez vamos a arreglar el tejado cuando aún brilla el sol", afirmó ante sus correligionarios.

En lo que los comentaristas han interpretado como un alegato electoral, Osborne prometió además congelar el impuesto sobre la gasolina hasta mayo de 2015 -siempre que pueda "ahorrar" en alguna otra parte- así como endurecer las condiciones para los desempleados a largo plazo que dependen del subsidio estatal.

En este sentido, confirmó que los parados durante más de tres años sólo podrán cobrar sus ayudas si hacen horas semanales de servicio a la comunidad -como recoger basura o atender a ancianos-, van a diario al centro de empleo a buscar trabajo o asisten a cursos obligatorios para mejorar sus opciones.

Mostrar comentarios