Madrid. Farmaindustria propone a la comunidad trabajar juntos en la salida de la crisis

La presidenta de Farmaindustria, Elvira Sanz, propuso hoy al Gobierno de la Comunidad de Madrid que se abra un “marco de diálogo permanente” con la industria farmacéutica con el objetivo de que el sector tenga un papel determinante en la salida de la crisis.
Así lo hizo en el acto de inauguración de la primera edición del Foro de la Industria Farmacéutica de Madrid, al que asistieron el consejero de Sanidad de la Comunidad, Francisco Javier Rodríguez; la secretaria general de Sanidad y Consumo, Pilar Farjas, y el presidente de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (Aeseg), Raúl Díaz-Varela.
Sanz destacó que la industria aporta cada año al I+D+i alrededor de 300 millones de euros, lo que supone un 30% del gasto total realizado en España en la materia.
“La Comunidad de Madrid tiene una buena base en esta industria para convertirse en un exponente de esta apuesta por la innovación y por un nuevo modelo productivo y económico del que tan necesitado está nuestro país”, explicó Sanz.
En su intervención, la presidenta de Farmaindustria puso de manifiesto que la industria farmacéutica es un referente en las economías desarrolladas y destacó que en la Comunidad de Madrid tiene una fuerte raigambre, por lo que “fomentar su crecimiento es de suma importancia para que la región siga posicionada como uno de los buque insignia en Europa y en el mundo”.
Sanz destacó que actualmente tiene su sede en la Comunidad casi un centenar de compañías farmacéuticas, más de un 25% del total nacional, que asciende al 35% si se consideran los laboratorios con más de 100 asalariados. Del mismo modo, aseguró que 11 de las 13 multinacionales con mayor volumen de ventas en el mundo están asentadas en la región.
Según datos del Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid, 10.500 trabajadores son empleados por la industria farmacéutica en la región, lo que representa el 4,5% del total de toda la industria madrileña. “Un empleo que es altamente cualificado, con un índice de temporalidad muy bajo y muy diversificado”, concluyó Sanz.