Madrid. La catedral de las nuevas tecnologías se estrenará a principios de 2011

Las obras del Centro de Expresión e Innovación de Nuevas Tecnologías, también conocido como la catedral de las nuevas tecnologías, avanzan a buen ritmo; y se espera que se estrene a principios de 2011.
La buena marcha de las obras fue constatada este viernes por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que visitó los trabajos que se llevan a cabo en la antigua fábrica de ascensores Boetticher, en el distrito de Villaverde, junto al secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Bernando Lorenzo Almendros.
Pese a la complejidad técnica del proyecto y las dificultades derivadas de un edificio que es patrimonio industrial, Gallardón dijo que se cumplirán las previsiones y a principios del próximo año se estrenará este Centro, "un proyecto que vinculará este distrito con la economía del conocimiento, y ofrecerá nuevas oportunidades de progreso para todo Madrid".
Las obras de rehabilitación en la nave Boetticher fueron adjudicadas en diciembre de 2008 y suponen una inversión total de 34 millones de euros, de los que 24 corresponden a la obra civil, que el Ayuntamiento está financiando con la ayuda del Plan Avanza de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones. Actualmente trabajan en su construcción más de 150 personas, que superarán el millar a lo largo de todas las obras.
Gallardón argumentó que lo más importante de este proyecto no es su tamaño, sino sus dotaciones y equipamientos vanguardistas, "que harán de él un auténtico escaparate de las últimas soluciones en materia de domótica, telecomunicaciones o sostenibilidad".
El nuevo complejo estará compuesto por varias zonas diferenciadas, destinadas a distintas facetas de la promoción de la tecnología y de la innovación, tanto para los ciudadanos como para empresas y profesionales.
En torno a la vieja nave se está construyendo una amplia zona congresual, que posibilitará el encuentro de profesionales en conferencias y congresos de carácter eminentemente tecnológico; y la antigua nave Boetticher, de elevado interés arquitectónico, se dedicará a actividades de divulgación y exhibición de las nuevas tecnologías, informática, telecomunicaciones, ingeniería, nano y biotecnología, y nuevos materiales, y sus aplicaciones a la vida diaria de las ciudades, las empresas y las personas.
El proyecto contempla también la construcción de un edificio de seis alturas donde se ubicará una "Factoría de Innovación", un "centro de alto rendimiento" en innovación destinado a fomentar la cultura innovadora y la creatividad en las empresas, entre otras instalaciones.