Mario Monti recibe el encargo de formar Gobierno en Italia

Carmen Postigo

Roma, 13 nov.- El presidente de la República encargó al excomisario europeo Mario Monti, la formación de un nuevo Ejecutivo, tras la dimisión anoche del primer ministro Silvio Berlusconi.

Monti fue convocado esta tarde en el Palacio Quirinal, sede de la presidencia de la República, después de que Napolitano, de 86 años, concluyera una jornada de consultas con los expresidentes de la República y con los líderes de los partidos con representación parlamentaria para buscar una salida a la situación tras la dimisión de Berlusconi.

Una vez recibido el encargo de formar Gobierno, Monti hizo su aparición en la misma sede de la República para hacer una breve declaración: "Italia debe volver a sanear su economía y emprender de nuevo el camino del crecimiento. Es algo que debemos a nuestros hijos, a quienes debemos dar un futuro concreto de dignidad y esperanza".

Asimismo apuntó que "Italia puede superar la situación de emergencia con el esfuerzo común" y se comprometió a dar forma a su Gobierno "en tiempos breves", tiempos que no especificó.

Todas las formaciones políticas menos la Liga Norte se mostraron de acuerdo con un Gobierno técnico presidido por el excomisario europeo de Mercados y Valores, Mario Monti, de 68 años, quien cuenta también con el respaldo de las cancillerías europeas que lo ven como una garantía para la estabilidad de los mercados y la aceleración de las reformas económicas que debe acometer Italia.

Tras sus encuentros con el Jefe del Estado, los líderes y representantes de los diversos partidos políticos italianos expresaron su posición oficial respecto al Gobierno de Monti, y resultó que todos se mostraron a favor, algunos con condiciones, y uno, la Liga Norte, tajantemente en contra.

Así las cosas, es posible que Monti acepte ya en las próximas horas el encargo y presente la lista de ministros.

La jura del cargo y de los ministros puede producirse mañana y el martes o miércoles Monti podría presentarse ante la Cámara de los Diputados y al Senado para recibir el voto de confianza.

El partido Berlusconi, el Pueblo de la Libertad (PDL), apoyó la formación de un Gobierno técnico de transición liderado por Monti.

El secretario general del partido, Angelino Alfano, aseguró que el PDL no comparte la presencia de políticos en el nuevo Ejecutivo y dijo preferir que esté formado por personalidades técnicas.

Insistió Alfano en que la actuación de Monti deberá basarse en los compromisos de reforma adquiridos por Italia ante la Unión Europea (UE) y manifestó además su descontento por que este Gobierno no salga de las urnas.

En cuanto al mayor partido de la oposición, el Partido Demócrata (PD), su líder Pier Luigi Bersani precisó que su partido apoya a un Ejecutivo "totalmente nuevo" y con una fuerte presencia de técnicos capaces de "conseguir que Italia esté en condiciones de afrontar la emergencia" en la que está sumida.

El llamado Tercer Polo, formado por los partidos Alianza para Italia (API), Unión de Demócratas y Cristianos (UDC) y Futuro y Libertad (FLI), secundó la formación de un Gobierno liderado por Monti.

Pierferdinando Casini, que estuvo acompañado por Francesco Rutelli, líder de API, y por Italo Bocchino, vicepresidente de FLI, entre otros, destacó que los partidos italianos "se encuentran en una encrucijada: especular sobre la situación esperando algún beneficio electoral o asumir la responsabilidad de salvar al país".

A su vez, el líder del opositor Italia de los Valores (IDV), el exmagistrado Antonio Di Pietro dijo que espera conocer el futuro equipo de Gobierno de Monti, el programa, y sobre todo, el tiempo de duración del nuevo Ejecutivo para decidir si le apoya o no.

Por su parte, el líder de la federalista Liga Norte, Umberto Bossi no se anduvo por las ramas y afirmó que no está de acuerdo con un Gobierno técnico por lo que su formación pasará a la oposición.

"Hemos dicho no a la cama redonda. Será una cama redonda enorme, no tiene necesidad de nosotros. Estaremos en el oposición y vigilaremos", refirió Bossi a los periodistas.

Berlusconi, hoy aún primer ministro en funciones, aprovechó la jornada para afirmar que ha dimitido por "sentido de Estado y de responsabilidad" hacia Italia y anunció que seguirá en política y que "redoblará" sus esfuerzos en el Parlamento y en las instituciones para renovar el país.