Méndez dice que diseña un horizonte de empobrecimiento generalizado

Murcia, 15 feb.- El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha dicho hoy en rueda de prensa que la reforma laboral diseña un horizonte en el que se puede producir el empobrecimiento generalizado de la sociedad española, que perdurará incluso más allá de la recuperación económica del país.

A su juicio, no ha sido concebida para crear empleo, lo cual ha sido reconocido por el propio Ejecutivo, y apunta únicamente a darle respuesta al empresario frente a la crisis mediante el despido.

"Ni siquiera se puede decir que no se percibirá a corto plazo porque seguirá aumentando el paro y continuará la destrucción de empleo", ha añadido Méndez, quien considera que se trata de un "error deliberado de diagnóstico" del Gobierno con una reforma de impronta ideológica muy fuerte y que poco tiene que ver con lo que necesita el país.

Según el líder de UGT, a medio plazo tampoco va a ser una solución para el paro porque va a suponer la precarización creciente del mercado laboral y su efecto será mas bien estadístico "para maquillar de forma burda" la temporalidad mediante el contrato por tiempo indefinido de apoyo a los emprendedores.

Además, Méndez ha dicho que al millón y medio de personas en paro que carecen de prestación se les condena "a la cola de la cola" en la contratación por parte de empresarios que busquen incentivos.

Para el líder de UGT, España necesita convencer a las instituciones europeas de que es imposible que pueda cumplir con la reducción del déficit porque de lo contrario provocaría una mayor recesión y un perjuicio mayor.

Preguntado por la huelga general, ha manifestado que no van a "morder el anzuelo" y que ahora han optado por explicar a toda la clase trabajadora los detalles de la reforma. "Lo que quisiera el Gobierno es que no se hablara de la reforma laboral y de sus contenidos", ha opinado.

"Todo dependerá de la sensatez de las administraciones y de los empresarios", ha dicho Méndez, tras de lo cual ha comentado el caso de empresas con ERE iniciado y que ha sido retirado una vez conocida la reforma laboral por no necesitar ya el acuerdo con los sindicatos.

También ha augurado la judicialización de los despidos gracias a que la reforma especifica las causas, y el juez tendrá que limitarse a reflejar en la sentencia el papel que le aporta el empresario al invertirse la carga de la prueba que hasta ahora se basaba en el conocido aforismo: "In dubio pro operario", es decir, "en caso de duda se optaba por el trabajador".

De la reforma financiera, ha pronosticado que supondrá despedir a 20.000 empleados por las fusiones, y el crédito será más difícil de conseguir y más caro.