Moody's mantiene la calificación de BBVA tras la compra de Catalunya Banc

Madrid, 29 jul.- La agencia de medición de riesgos Moody's ha confirmado hoy la calificación a largo plazo de BBVA, que coincide con la de España, tras la adjudicación de Catalunya Banc con un descuento significativo frente a su valor en libros.

A principios de marzo, tras la mejora de la nota de España, Moody's elevó la solvencia de BBVA hasta Baa2, un "aprobado", y explicó que la perspectiva sobre la entidad era positiva, con lo que dejaba la puerta abierta a futuras subidas de la calificación.

Hoy, una semana después de que BBVA ganara la subasta Catalunya Banc, Moody's confirma la nota del gigante financiero por su capacidad para afrontar la compra, por la que pagará como mucho 1.187 millones frente a los 2.500 a los que está valorado el grupo nacionalizado.

Recuerda también que los activos de Catalunya Banc, cuya solvencia estaba en mínimos, sumaban unos 63.000 millones a cierre de 2013 frente a los casi 600.000 millones de BBVA.

Además destaca que la compra del grupo catalán por parte de BBVA apenas tendrá impacto en su capital, unos 55 puntos básicos según las previsiones del banco, y ello combinado con la capacidad de generar ingresos recurrentes hacen "manejable" la operación.

Y aunque BBVA no se beneficiará de ningún esquema de protección de activos que le blinde de futuras pérdidas en la cartera de Catalunya Banc, Moody's subraya que sí tendrá garantías adicionales por parte del Estado que mitigan el riesgo de la compra.

En concreto, la compra está supeditada a que Catalunya Banc venda al fondo Blackstone una cartera de hipotecas problemáticas; BBVA podría pagar 267 millones menos si no se le permite beneficiarse de unos 402 millones en activos fiscales de Catalunya Banc; y el Estado asumiría parte de las reclamaciones por preferentes, cláusulas suelo o la ruptura del acuerdo de bancaseguro con Mapfre.

Al margen de Moody's, la semana pasada Fitch ya dijo que veía "probable" mantener la nota de BBVA, "A-" o "notable bajo", -un escalón por encima de la española- tras la compra de Catalunya Banc porque más del 50 % de los ingresos del grupo seguirán proviniendo de fuera de España.