Los murcianos retrasan la planificación de su jubilación hasta los 43 años

Más aún cuando todo lo relativo a las pensiones es uno de los temas más candentes en la actualidad, sobre todo si tenemos en cuenta el grado de desconocimiento pero también de preocupación hacia la jubilación por parte de los ciudadanos.

Lo cierto es que los murcianos no comienzan a planificar su jubilación hasta los 43 años, a pesar de que el 42% de los encuestados considera que no tendrán suficiente con la pensión pública. Éstos son solo algunos de los datos que arroja la 2ª parte del estudio 'Previsión Social Empresarial y Jubilación en España', centrada en los empleados y realizado por la compañía de investigación de mercados GFK para Nationale-Nederlanden.

Del estudio se desprende que casi la mitad de los murcianos -más del 48%- no dispone de ningún producto de ahorro o inversión complementario a la pensión pública de jubilación porque, afirman, lo ven lejano o no les hace falta. En cambio, el 23,3% considera que sus ingresos se verán muy afectados cuando se jubilen.

"En el entorno de incertidumbre actual, Nationale-Nederlanden ha impulsado este estudio con el objetivo de conocer en profundidad cómo planifican su jubilación los empleados murcianos y saber hasta qué punto las empresas les facilitan las herramientas para hacerlo a través de sistemas de previsión social alternativos", explica Carlos González Perandones, subdirector general de Nationale-Nederlanden.

Y es que, se está produciendo un cambio con respecto a la jubilación de directivos y empleados de las empresas. El panorama actual se ha visto afectado por varios factores como las reformas de la legislación en materia de Seguridad Social, que traerán como consecuencia la reducción de las pensiones y la inexistencia de una edad obligatoria para jubilarse.

El estudio pone de relieve que existe un alto desconocimiento y despreocupación hacia la jubilación entre los empleados murcianos. Sólo 3 de cada 10 saben cuál es el periodo mínimo de cotización necesario para acceder a la pensión de la Seguridad Social -la cifra más baja después de los catalanes- y más del 67% ignora cuál es la edad mínima para obtener el máximo de pensión. Además, sólo un 18,9% conoce cómo será su situación financiera cuando se jubile.

Por otro lado, únicamente el 31,8% conoce las modificaciones que se han realizado en su cuantía y en las condiciones de acceso. De hecho, sólo el 26,9% confiesa haberse documentado con antelación sobre la cuantía futura de su pensión.

Ante estos resultados, para Carlos González Perandones resulta imprescindible que "la empresa, directivos y trabajadores pongan el foco sobre una solución de jubilación en función de sus necesidades, capacidad y situación específica. Las empresas, de alguna forma, tienen que asumir la responsabilidad de crear concienciación entre sus empleados y desarrollar herramientas que faciliten la planificación de su futuro financiero de forma conjunta".

EL AHORRO, A EXAMEN

Como se ha mencionado, según el estudio, el porcentaje de los empleados que no cuenta con ningún plan de ahorro o inversión para complementar la jubilación es muy alto -más del 48%-, siendo los motivos económicos la principal barrera para disponer de ellos.

De hecho, un 47% de entrevistados aseguran que en su situación actual no tienen la capacidad de ahorro necesaria para planteárselo. Del 51,6% de empleados murcianos que sí tiene contratado algún producto de este tipo, solo un 6,4% lo tiene, exclusivamente, a través de su empresa.

Es significativo que, del 6,4% de empleados que cuentan con algún producto para reforzar su jubilación a través de su empresa, de los que casi el 74% desconoce la rentabilidad que obtendría. En cambio, el 65,8% coincide en que es responsabilidad de la empresa contribuir a mejorar la previsión de jubilación de sus empleados.

"Todos estos datos indican -según señala González Perandones-, que las empresas españolas tienen un reto muy importante: por una parte, concienciar a sus empleados sobre la importancia de prever con la suficiente antelación los mecanismos necesarios para poder mantener su nivel de vida y su expectativas financieras una vez jubilados y, por otra parte, facilitarles esos instrumentos de ahorro y previsión."