Qatar lesiona a Florentino tanto en los negocios como en el fútbol

El gran aliado de España es, sin embargo, la bestia negra de Florentino. El emirato de Qatar, que hace apenas mes y medio se comprometió con el presidente del Gobierno, José Luís Rodríguez Zapatero, a invertir 3.000 millones en España, está jugando todas sus cartas en contra de los intereses del capo de ACS.

Su primer enfrentamiento se remonta al pasado mes de octubre, cuando el Ejecutivo de Angela Merkel también llamó a la puerta del emir Hamad bin Khalifa Al Thani para pedir ayuda en la batalla empresarial entre la constructora germana Hochtief y la española ACS.

Qatar no tardó en tenderle su mano y, el pasado 6 de diciembre, se hizo con el 9,1% de la empresa alemana, a cambio de 400 millones de euros, y selló un acuerdo estratégico con el equipo directivo, que está enfrentado con la compañía española.

Aunque esta jugada no impidió a ACS sacar adelante su opa, sí le obligó a tener que elevar un 12,5% la oferta, que se llevó a cabo mediante un intercambio de acciones.

Suma y sigue, porque, mientras en Alemania complicaba a ACS una de las operaciones empresariales más importantes de los últimos tiempos, en España, el emirato llegaba a un acuerdo de patricinio con el Fútbol Club Barcelona.

Fue también el pasado mes de diciembre cuando Qatar Fundation selló un acuerdo con la directiva de Sandro Rosell para patrocinar durante los próximos cinco años al Barça, a cambio de inyectarle 166 millones de euros.

Algunos portales llegaron a publicar que el Real Madrid de Florentino Pérez intentó meterse en medio de la operación, sin apenas éxito, ya que los árabes siempre consideraron al Barcelona como su mejor opción.

El club blanco cuenta ya con el patrocinio de Bwin, cuyo actual contrato se remonta a 2007. El problema es que la nueva normativa del Juego Online puede terminar poniendo pegas a este tipo de acuerdos.

El proyecto de ley, por el momento, sigue permitiendo estos patrocinios, pero todavía está pendiente todo el desarrollo del texto, lo que se convierte en una amenaza, por pequeña que sea.

La última zancadilla del emirato a Florentino Pérez llegó ayer mismo, con el contrato firmado entre el brazo inversor de Qatar e Iberdrola.

Este acuerdo contempla un aumento de capital de 253,76 millones de euros y la venta de acciones en autocartera que permitirán a Qatar Holding hacerse con el 6,16% de la eléctrica.

Con este nuevo aliado, Ignacio Sánchez Galán, presidende de Iberdrola, quiere reforzar el núcleo accionarial afín a su causa y hostil al primer accionista, a la sazón, ACS, dueño del 20% del capital.

Con la irrupción de Qatar, la constructora de Florentino Pérez no sólo verá diluir su participación en un 1,2%, un golpe menor, sino que tendrá enfrenta a un viejo enemigo, con el que tiene ya demasiados frentes abiertos.