Madrid, 27 oct.- El Grupo Santander no tendrá problemas para cumplir con los requisitos mínimos de capital del 9 % fijados anoche en Bruselas, que en su caso suman 14.971 millones de euros sin contar con las emisiones de bonos convertibles y que no le obligarán a ampliar capital ni a cambiar su política de dividendos.
Así lo explicó hoy el consejero delegado del Grupo Santander, Alfredo Saenz, en la presentación de las cuentas correspondientes a los nueve primeros meses del ejercicio, periodo en que ganó 5.303 millones de euros, el 12,8 % menos que en 2011.
Para Sáenz, el objetivo de llegar al 9 % de capital principal se podría alcanzar incluso en diciembre.
Tampoco tendrán problemas para lograr el capital que necesiten las otras cuatro entidades que también deben elevarlo en función de su tamaño, según los criterios de la autoridad bancaria europea (EBA) -BBVA, BFA-Bankia, La Caixa y el Popular-, que deben sumar entre las cinco, incluido el Santander, 26.161 millones de euros.
No obstante, Saenz vio "chocante" que a las entidades españolas se las demande más capital que a las alemanas o francesas, que son las que mayor exposición tienen a la deuda soberana griega, pero "los sistemas de cálculo nos han llevado a estas cifras", que "son las que han salido", admitió resignado.
Las necesidades de capital de la banca española, que han sido "muy abultadas y estridentes", se hubieran reducido en 9.000 millones de euros si desde un principio la EBA hubiera contabilizado como capital los bonos convertibles en acciones de las entidades, criticó.
Las nuevas exigencias europeas, la crisis y la morosidad, que seguirá subiendo al menos hasta la segunda mitad de 2012, en opinión de Sáenz, tampoco harán que el Grupo renuncie a cumplir su objetivo de igualar en el conjunto del año el beneficio neto de 8.181 millones de euros conseguido en 2010.
Para lograrlo, el Santander tendría que ganar en el último trimestre del año unos 2.878 millones de euros, lo que Sáenz cree que se conseguirá o quizá "un poquito menos", porque "falta todo un trimestre".
Sin embargo, Saénz no mantuvo las previsiones realizadas en anteriores trimestres de que el pico de la morosidad se alcanzaría en este ejercicio, ya que, según dijo, aún hay "mora potencial" que no ha aflorado, por lo que el crecimiento continuará en 2012, sobre todo en el sector de la promoción inmobiliaria.
A cierre de septiembre, la tasa de mora del Grupo se situó en el 3,86 %, ligeramente por encima del 3,42 % de un año antes, y también un poco más alta que el 3,73 % con que acabó junio.
En España, la morosidad se elevó al 5,15 %, debido a la caída del crédito, frente al 4,81 % que marcó en el trimestre anterior.
En opinión de Sáenz, las medidas anticrisis decididas anoche en Bruselas beneficiarán a la economía real española porque servirán para recuperar la confianza de los mercados y ayudarán a que fluya el crédito.
Sin embargo, esas iniciativas, y en concreto las necesidades de capital de la banca, cifradas en más de 26.000 millones de euros, no serán la causa de que no crezca el crédito en España, puesto que hasta ahora apenas había "demanda solvente".
Tampoco deberían afectar "al apetito de compra" de las entidades españolas, dijo Sáenz, que consideró que "no se modificará la actitud" de los interesados de la subasta de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), intervenida por el Banco de España.EFE
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