El ministro español de Industria, Miguel Sebastián, ha ofrecido la ayuda del Gobierno para intermediar en el conflicto que enfrenta a Sacyr con la presidencia de Repsol, en la que la constructora es el primer accionista, con un 20,01% del capital.
"Si nos piden mediación, estamos dispuestos a echarles una mano", dijo Sebastián a los periodistas en un encuentro del sector de telecomunicaciones.
"Nos ponemos a disposición del presidente y de los accionistas si creen que podemos hacer algo, pero de momento no nos han llamado", señaló.
Sebastián añadió que el Gobierno considera importante la gestión de la petrolera ya que se trata de "una empresa estratégica".
"Lo que nos preocupa es si hay algún daño en la reputación y en la imagen de una compañía que es estratégica para España", añadió Sebastián.
El viernes, el Consejo de Administración extraordinario convocado por Repsol ratificó la gestión del plan estratégico del grupo y las funciones ejecutivas de Brufau por unanimidad, aunque los tres representantes dominicales de su mayor accionista, Sacyr, no acudieron al encuentro.
El presidente del grupo constructor, Luis del Rivero, se ha mostrado claramente opuesto a la gestión y el plan estratégico promovido por el presidente de su participada y ha propiciado una gran ola de especulaciones con respecto a una posible destitución del presidente de Repsol.
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