Meirelles ha asegurado que el Gobierno retirará de la ley sobre la deuda de los estados medidas que limiten sus gastos en empleados estatales. Sus desembolsos corrientes serán encarados por una ley diferente que cambiará la ley de responsabilidad fiscal.
El ministro ha confirmado que el Gobierno mantendrá el proyecto de ley actualmente en estudio en el Congreso que da a los estados brasileños un alivio sustancial a sus deudas, a cambio de poner un techo a sus gastos y una prohibición de subir los salarios de funcionarios públicos durante dos años.
El Gobierno está impulsando que esa ley se vote esta semana, tras varias postergaciones.
El presidente en funciones, Michel Temer, ha tenido problemas para lograr la aprobación de la ley en el Congreso por la resistencia de algunos gobernadores, que quieren suavizar algunas medidas de austeridad.
Algunos analistas acusan a Meirelles de ceder ante la presión de los gobernadores y atenuar la legislación original, que apuntaba a equilibrar las finanzas de estados que tienen problemas para honrar sus deudas.
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