En este contexto, ha incidido en que "a veces las crisis abren oportunidades", aunque ha matizado que esta "supuesta crisis no lo es tanto", dado que no ha habido ningún vacío de poder en el parlamento aragonés.
A su entender, el hecho de que se haya cerrado este capítulo con un acuerdo "a los conservadores parece que no les acaba de gustar", dado que supone que no haya "tanta inestabilidad", ha ironizado.
Este pacto supondrá que la vicepresidenta de las Cortes, Violeta Barba, de Podemos, pase a ser la presidenta en sustitución del socialista Antonio Cosculluela, quien ha anunciado su renuncia al cargo para mantenerse en la Alcaldía de Barbastro (Huesca). Por su parte, Florencio García Madrigal, del PSOE, se hará cargo de la vicepresidencia.
En una rueda de prensa, Briz ha relatado que el acuerdo alcanzado hace un año para la Mesa de las Cortes ha habido que "reeditarlo" para "imposibilitar que hubiese una presidencia conservadora, que no era demasiado positiva ni para el Gobierno de Aragón, ni para los proyectos de las cuatro fuerzas que hemos firmado el acuerdo".
Ha sostenido que este pacto "va más allá que un cambio de cromos", y ha incidido en que es "bueno" que se abra un cauce entre estas cuatro fuerzas políticas que suman mayoría en las Cortes. "Este acuerdo abre cauces de diálogo y negociación para hablar de todos los proyectos que puedan beneficiar a los aragoneses", ha agregado.
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