El decreto tendrá que aprobarse en uno de los dos consejos de gobierno previstos ordinarios antes de fin de año o en un consejo extraordinario que se convoque para este fin. Y es que el 31 de diciembre acaba la vigencia de las actuales cuentas públicas.
El retraso de la presentación de los nuevos presupuestos se ha debido a la falta de gobierno de la nación, ya que es necesario que el Ejecutivo central apruebe una serie de parámetros, como el techo de gasto o el déficit, para que las comunidades puedan diseñar sus presupuestos.
El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) que fijó el déficit en un 0,6 por ciento para las comunidades autónomas y que estableció también el techo de gasto fue determinante para la puesta en marcha de los nuevos presupuestos, aunque estos parámetros tengan que pasar primero por las Cortes.
La consejera de Economía y Hacienda, Engracia Hidalgo, ha afirmado este miércoles que están trabajando en dos frentes. Por un lado, preparando la prórroga y por otro, elaborando los nuevos presupuestos.
En principio, quieren presentarlos en enero y a partir de ahí empezará la tramitación ordinaria en la Asamblea. Este año va a ser "más complejo", ha apuntado, para añadir que a pesar de ello "no va a afectar a la prestación de los servicios públicos".
No obstante, el Grupo Popular se enfrenta a otro escollo y es la falta de la diputada Elena González Moñux en las bancadas de la Asamblea de Madrid, ya que está de baja tras haber denunciado haber sido víctima de acoso laboral por parte del portavoz del Grupo, Enrique Ossorio.
Desde el PP esperan que para el momento en que se tengan que aprobar las cuentas públicas Moñux esté de vuelta en la Cámara de Vallecas.
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