La Cruz Roja en Jerusalén indicó el miércoles haber decidido por razones de presupuesto reducir el número de visitas de familiares a los presos palestinos en cárceles israelíes.
Unos 200 palestinos, indignados por la decisión, se manifestaron ante la sede del Comité Internacional de la Cruz Rojo (CICR) en Jerusalén Este ocupada y anexionada a Israel.
El CICR lleva a cabo un programa desde 1968 para facilitar el contacto y las visitas de los palestinos a sus allegados en las cárceles israelíes.
A partir de julio, el CICR reducirá de dos por mes a una sola el número de visitas de sus familiares, indicó la organización en un comunicado.
Esta medida sólo afecta a los hombre encarcelados, la mayoría, no a las mujeres ni a los menores, precisó.
"Teniendo en cuenta las necesidades humanitarias cada vez más importantes en la región y en el mundo, hemos procedido a recortes presupuestarios para optimizar nuestros esfuerzos y nuestros recursos limitados, y porque somos deudores de los beneficiarios y de los donantes", dijo el comité.
Unos 7.000 palestinos están detenidos en las cárceles israelíes, según grupos palestinos de defensa de los derechos.
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