Se tratan del código Tributario, el de Aduanas y Catastro, la Ley General Tributaria y la Ley de Definición de Tributos e Impuestos, según ha informado en un comunicado la patronal catalana.
En el caso del primero, Salvadó ha detallado que "incluye la propuesta de crear un consejo fiscal entendido como un órgano que debe ser independiente y un punto de encuentro entre los intermediarios fiscales y las grandes administraciones tributarias".
Asimismo, la de Aduanas y Catastro también tendrá cambios estructurales y ha subrayado que "todo lo que no se pueda regular quedará sometido al régimen fiscal español, basándose en el derecho supletorio".
Salvadó ha precisado que se crearán instrumentos dentro de la propia administración, más eficientes y para dar a conocer estas modificaciones, propiciando funciones delegadas en la Agencia Tributaria y también en los Registros de la Propiedad, que obligarán a un aumento de la plantilla.
A nivel operativo, está previsto un sistema informático "robusto con una gran base que permitirá crear datos y detectar perfiles de los contribuyentes" que tendrá como objetivo perseguir el fraude fiscal.
Ha justificado que estas medidas pretenden "crear un administración más eficiente y próxima", por su parte, los representantes institucionales de Cecot le han reclamado estabilidad al Govern y la aprobación de unos presupuestos para garantizar esta estabilidad imprescindible para dar confianza al empresario.
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