El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, dijo este viernes en la ONU que el acuerdo alcanzado por su país y Estados Unidos para un cese del fuego en Siria tiene que ser preservado.
Lavrov dijo a la Asamblea General de la ONU que "no hay alternativa" que el proceso conducido por Moscú y Washington, y apuntó que "es esencial evitar el fracaso de esos acuerdos".
En un enérgico discurso, el jefe de la diplomacia rusa dijo que se torna esencial conducir una investigación "imparcial" sobre el ataque a un convoy con ayuda humanitaria de la ONU y la Media Luna Roja en las proximidades de Alepo, para deslindar responsabilidades.
"Ésta es una condición fundamental para fortalecer un régimen de cese de hostilidades y una tregua nacional", señaló.
Además, dijo Lavrov, es imperioso trazar una línea que divida a "la llamada oposición moderada de los grupos terroristas, y una especial responsabilidad en esto recae sobre Estados Unidos y la coalición que los estadounidenses conducen".
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