"El PP tiene una hoja de ruta perfectamente definida para acabar con los servicios públicos no privatizados, porque lo que le interesa es el negocio", ha dicho Rosón.
A su juicio, no es casual que se haya empezado por los ayuntamientos. "Quiere ahogar y bloquear cualquier capacidad de actuación de la Administración local, impedir cualquier cambio que se impulse desde los municipios, tras perder en mayo del año pasado numerosas alcaldías", ha señalado Rosón.
El concejal ovetense considera que el requerimiento de Montoro es "ideológico", ya que sólo afecta a empresas públicas. "Si el servicio está privatizado, aunque cueste un riñón, a Montoro no le molesta. El único problema que tiene el PP con el gasto público es cuando las grandes empresas privadas no se quedan con una parte del pastel y el dinero público se dedica íntegramente a satisfacer necesidades ciudadanas", manifestó el concejal ovetense.
Ha explicado que Gijón, que presta el servicio de transporte a través de una empresa municipal, asume un coste por habitante de 31 euros, mientras que la subvención de Oviedo a la empresa TUA, del Grupo ALSA, es de 40,7 euros por habitante.
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