El Parlament ha aprobado este miércoles tramitar una ley de C's que propone reformar la Oficina Antifraude de Catalunya (OAC) con el objetivo de reforzar el control sobre los nombramientos de los responsables de este órgano, salpicado por una fuerte polémica cuando su director era Daniel de Alfonso.
La ley se ha tramitado porque JxSí ha retirado su enmienda a la totalidad: la había presentado por considerar que la iniciativa de C's era incompleta y "oportunista", y la ha retirado porque ve pertinente abrir un debate sobre introducir reformas en el funcionamiento de la Oficina.
La norma presentada por C's propone modificar los procedimientos de nombramiento y control del director de la OAC por parte del Parlament para "reforzar la transparencia, competitividad y publicidad" e incrementar los requisitos de experiencia y honarabilidad de los candidatos.
Entre otros cambios, el partido de Inés Arrimadas plantea que los candidatos salgan de una convocatoria abierta --ahora es competencia del presidente de la Generalitat proponer un nombre--, y que la elección requiera de dos terceras partes de diputados del Parlament --ahora son tres quintas partes--.
Aunque la ley se ha debatido este miércoles, C's la presentó en junio de 2016 después de que se filtraran las conversaciones entre el director de entonces de la Oficina, Daniel de Alfonso, y el exministro Jorge Fernández Díaz en el que hablaban de investigar a cargos soberanistas, entre otras cuestiones.
Esa polémica acabó con el Parlament destituyendo a De Alfonso, y con el Congreso reprobando al ministro y también impulsando la creación de una comisión de investigación para aclarar si había utilizado el ministerio para maniobrar contra políticos catalanes.
La diputada de C's Lorena Roldán ha dicho que la OAC se ha caracterizado por los nombramientos "a dedo", y ha citado el caso de la exdirectora adjunta Maite Masià, que suscitó polémica por sus vínculos con CDC y por aparecer en el sumario del caso de las ITV.
Antes de conocer que JxSí retiraría la enmienda a la totalidad, Roldán ha criticado que al PDeCAT y al PP "no les interesa luchar contra la corrupción" ya que tienen a miembros afectados por procedimientos judiciales y ha criticado que ambos partidos quieren hacer y deshacer sin ningún control.
EL PP LO RECHAZA
El único partido que se ha opuesto a la tramitación de la ley ha sido el PP, y la diputada Esperanza García ha criticado que es una iniciativa impulsada "con muy poca seriedad y muy poco trabajo detrás", que C's solo presentó para que tuviera un efecto mediático.
El diputado de JxSí Lluís Corominas también ha criticado la ley pese a facilitar su tramitación, asegurando que es una norma hecha de "cara a la galería" de la que no comparten casi nada de su contenido, pero ha considerado que ha llegado el momento de debatir cómo mejorar sobre la Oficina.
Ha anunciado que en el debate en comisión, lo primero que hará su grupo será pedir la comparecencia del actual director de la OAC, Miguel Ángel Gimeno, que ha demostrado mucha "solvencia e independencia", por lo que le pedirán que aporte sus ideas para mejorar este ente.
El resto de partidos de la Cámara, PSC, SíQueEsPot y la CUP también han apoyado la tramitación de la ley, pero les tres han coincidido en expresar sus dudas de que sea necesario cambiarla y, por ejemplo, el socialista, Ferran Pedret, ha dicho que su grupo "honestamente" no garantiza apoyar la norma en su debate final.
El diputado Lluís Rabell ha advertido del riesgo de que con la reforma de la Oficina se desvirtúe su funcionamiento actual, y el diputado Benet Salellas (CUP) ha dicho que el problema no es la OAC, sino que la justicia tiene un "sesgo de clase" porque de los 61.000 reclusos que hay en España, solo 82 lo son por corrupción.
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