El hallazgo se produjo el domingo, cuando un vecino alertó de la aparición de chispas en el cableado eléctrico del recinto y una patrulla policial y de Bomberos se personaron en el lugar, y una vez allí comunicaron la avería a la empresa y su operarios determinaron que se podría tratar de una manipulación de un contador.
La policía decidió contactar con el propietario del inmueble, que aseguró estaba alquilada para guardar material de obra y, tras registrar las instalaciones, comprobaron que el cableado se introducía en una puerta metálica, que forzaron los Bomberos con la autorización del titular.
En su interior había tres habitaciones: una con bidones, cajas de cartón, productos químicos y nutrientes --entre otros materiales relacionados con el cultivo de marihuana--, y en las otras dos encontraron el más de millar de plantas, iluminadas con focos y aparatos de ventilación con filtros de carbono.
Los agentes detuvieron al inquilino por un delito contra la salud pública y por fraude de fluido eléctrico y lo trasladaron a las dependencias policiales para realizar las correspondientes diligencias penales.
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