En concreto, ha detallado que el 47% de las ayudas se ha destinado a poner a salvo a periodistas amenazados y el 67% de los fondos se ha dirigido a apoyar las actividades de medios de comunicación y de organizaciones independientes.
En relación con la distribución geográfica de las ayudas, el 40% de las mismas ha ido a parar a la zona del Magreb y Oriente Medio; el 34% a África; el 12% a Asia; el 9% a Europa del este y Asia Central; y el 5% restante a América.
Por finalidad, según ha concretado Reporteros Sin Fronteras, el 47% de la asistencia ha tenido que ver con la reubicación y la seguridad de periodistas que han tenido que ponerse a salvo; el 20% con el apoyo a distintas actividades; el 15% con la cobertura de necesidades básicas; el 8% con el apoyo a familias; el 7% con distintos gastos médicos.
La organización apoya a los periodistas que se enfrentan procesos judiciales arbitrarios derivados de sus actividades periodísticas --contribuyendo a pagar sus gastos legales (por concepto de abogados)-- y a los que han sido víctimas de agresiones --ayudándoles a pagar los gastos médicos--. Asimismo, RSF apoya a sus familias, víctimas colaterales de las acciones de aquellos que se oponen a que exista una información libre.
"RSF se esfuerza para ayudar a los periodistas y a los medios de comunicación para que sigan haciendo escuchar su voz, libre e independiente, tanto en sus países de origen como en el exilio", ha afirmado el responsable de la oficina de Asistencia, Martial Tourneur.
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