Acepta siete años y medio por asestar 23 puñaladas a un compañero de trabajo

León, 25 sep.- El acusado de un delito de asesinato en grado de tentativa cometido al asestar 23 puñaladas a un compañero de trabajo en Fabero (León) ha reconocido los hechos que se le imputan y ha aceptado la pena de prisión del fiscal, que ha rebajado la solicitud de diez años y medio a siete años y medio.

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de León ha dejado visto para sentencia el caso esta mañana después de que el acusado, J.C.A.R., de origen dominicano, reconociese las acusaciones del Ministerio Fiscal, que concluyó en su escrito la existencia de un delito de asesinato en grado de tentativa.

Los hechos ocurrieron el 7 de junio de 2010 cuando el acusado, movido por el malestar con los dirigentes de la empresa para la que trabajaba, una fábrica de neumáticos con sede en el polígono industrial de Fabero, se dirigió a las oficinas administrativas y, de forma sorpresiva, propinó 23 puñaladas a uno de los ingenieros con ánimo de causarle la muerte, según el ministerio público.

El suceso se produjo de forma sorpresiva para la víctima, que se encontraba de espaldas a su agresor, tal y como ha reconocido las víctima durante la vista de hoy.

El fiscal solicitaba por estos hechos diez años y seis meses de prisión y una indemnización de 25.000 euros después de haber valorado que el acusado se entregase a la autoridades tras la agresión.

Esta mañana, el acusado, que se encuentra en prisión preventiva, ha reconocido los hechos expuestos por el ministerio público lo que ha llevado al fiscal a modificar sus conclusiones "por la conformidad del acusado" rebajando la pena de prisión solicitada a siete años y seis meses.

También ha presentado una modificación en la cuantía demandada al acusado en concepto de responsabilidad civil elevándola a 30.000 euros.

La vista se ha desarrollado con rapidez tras el acuerdo alcanzado previamente por las partes, y tan sólo la víctima, V.C.A., ha sido llamada a testificar corroborando el suceso.

El acusado ha pedido disculpas a la víctima y a su familia por los daños causados y ha manifestado su arrepentimiento por los hechos.