Acusan a Canadá de proteger intereses económicos de aliados de Putin

Toronto (Canadá), 16 may.- Los partidos de la oposición acusaron hoy al Gobierno canadiense de proteger los intereses financieros de aliados del presidente ruso, Vladimir Putin, para evitar que sufran sanciones por la intervención de Moscú en Ucrania.

El socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD) dijo hoy que el Gobierno del primer ministro Stephen Harper ha excluido a dos personas muy cercanas a Putin con inversiones en Canadá en su listado de sanciones y que sí entraron en la lista de sancionados elaborada por Estados Unidos.

"¿Estamos diciendo que si alguien tiene inversiones en Canadá y son amigos de Putin, serán protegidos?", preguntó hoy el diputado del NPD, Paul Dewar, en el Parlamento canadiense.

Dewar se refería a Igor Sechin y Sergey Chemezov, dos estrechos colaboradores de Putin que han sufrido las sanciones de Estados Unidos por la intervención de Rusia en Ucrania pero que no están incluidos en las sanciones canadienses.

Según informaciones aparecidas hoy en los medios de comunicación del país, Sechin, consejero delegado de la petrolera Rosneft, posee una importante inversión en el sector petrolífero canadiense.

Harper es diputado por la provincia de Alberta, donde está basada la poderosa industria petrolífera de Canadá.

Por su parte, Chemezov es responsable de Rostec, un conglomerado industrial y de equipo de defensa que tiene una empresa conjunta con la multinacional canadiense Bombardier, el mayor fabricante de ferrocarriles del mundo y el tercero de aviones.

La exclusión de Sechin y Chemezov de las sanciones canadienses se produce a pesar de que Canadá ha duplicado las sanciones aplicadas por Estados Unidos a colaboradores de Putin y altos cargos del régimen ruso.

Ottawa también ha expulsado a militares rusos en programas de cooperación en Canadá, ha suspendido todos los contactos entre las Fuerzas Armadas de los dos países y Harper ha comparado a Rusia con Alemania en la Segunda Guerra Mundial y a Putin con Hitler.

Se da la circunstancia de que en Canadá viven más de 1 millón de personas de origen ucraniano, muchas de ellas en áreas del país en las que el Partido Conservador de Harper es la fuerza dominante.