Segovia, 1 ene.- La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha recibido el año 2013 con optimismo porque ha asegurado que, pese a ser muy supersticiosa, el número 13 siempre le ha dado muy buena suerte.
Aguirre ha visitado hoy en la cárcel de Segovia a Ángel Carromero, el dirigente de Nuevas Generaciones condenado en Cuba a cuatro años por homicidio imprudente y trasladado a España para cumplir la pena, aunque la legislación carcelaria previsiblemente le permitirá alcanzar el tercer grado, según ha confiado la expresidenta de la Comunidad de Madrid.
Aunque en una comparecencia posterior ante los periodistas se ha referido casi exclusivamente al caso Carromero, que conducía el coche accidentado en el que murieron los opositores cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, suceso por el que fue sentenciado, también se le ha preguntado por su impresión acerca de la política española.
"Hoy no vengo a hablar de eso", ha cortado cualquier intento de poder continuar por ese camino, ha dicho Aguirre, en una comparecencia en la que ha estado acompañada por la senadora y vicesecretario de Organización del PP de Madrid, Gádor Ongil.
Sin embargo, ha aprovechado pasa desear lo mejor en este año que acaba de entrar a todos los españoles y, "en especial, a los madrileños". EFE
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