En el primer ataque, registrado en la periferia norte de la capital, falleció el chofer del autobús en lo que se presume podría ser una represalia por no pagar una extorsión a pandilleros, indicó la policía.
De su lado, un ayudante de un autobús falleció al ser atacada la unidad con armas de fuego en la periferia sur de la ciudad, informaron los Bomberos Municipales.
El tercer ataque se registró en el bulevar San Cristóbal, en el municipio de Mixco, colindante al oeste con la capital, con saldo de dos muertos -el conductor y el ayudante de la unidad de transporte-.
En relación con este último ataque, la Policía reportó la captura de los dos presuntos atacantes, cuyas edades oscilan entre 19 y 20 años. A los detenidos les decomisaron un arma de fuego y la motocicleta en que viajaban.
Tras la detención, un grupo de choferes y ayudantes de las unidades del transporte público intentaron vapulear a los dos presuntos sicarios.
Guatemala vive una ola de violencia que deja unos 6.000 muertos al año, principalmente por lucha entre cárteles de drogas y la acción de las pandillas que se dedican, entre otras actividades, al sicariato, la extorsión y el narcotráfico.
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