Al Shabab retoma el control de la ciudad de Hudur, en el sur de Somalia

Mogadiscio, 17 mar.- El grupo islamista somalí Al Shabab, vinculado a Al Qaeda, se ha hecho con el control de la ciudad de Hudur, la capital de la región de Bakol, en el sur de Somalia, después de que las tropas de Etiopía y del Ejército Nacional somalí abandonaran la localidad.

Según los residentes de Hudur, las fuerzas de Al Shabab entró anoche en la ciudad sin que se produjeran enfrentamientos violentos, ya que no se encontraron con resistencia.

"A medianoche recibimos la alerta de que las fuerzas etíopes y somalíes estaban dejando la ciudad para trasladarse hacia el norte, cerca de la frontera con Etiopía", explicó a Efe Dahabo Yusuf, de 63 años, una de las residentes de la ciudad.

"No sabemos por qué se han desplazado los militares, pero nos dijeron que fuéramos con ellos si teníamos miedo de Al Shabab, y de hecho muchos jóvenes y hombres les han seguido, pero yo soy vieja y no puedo", explicó Yusuf.

Por su parte, una página web que apoya a Al Shabab confirmó la toma de Hudur por parte de los rebeldes.

"Hudur está en paz, en manos de los islamistas. Le damos las gracias a Allah y a los muyahidines, que luchan siempre contra los infieles o contra los cristianos, y pedimos a aquellos que han huido de la ciudad a que vuelvan", afirma en declaraciones recogidas en la página web el gobernador de la región de Bakol, Mahad Abdi Karim.

Tropas etíopes están presentes en Somalia desde que en octubre de 2011 se inició una ofensiva en el país para acabar con Al Shabab, que tenía el control de la mayor parte de la zona sur.

Hudur fue conquistada por las tropas somalíes, con el apoyo de las etíopes, a finales de 2011.

A pesar de los avances logrados el año pasado en el terreno político con la elección de un Parlamento, un presidente y un primer ministro que puso fin al Ejecutivo de transición, Somalia se encuentra todavía inmersa en un conflicto armado.

Somalia vive en un estado de guerra civil y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barré, lo que dejó al país sin un Gobierno efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra y bandas de delincuentes.