Albania someterá a referéndum las reformas sobre la integración europea

Tirana, 5 mar. - El parlamento albanés ha aprobado la organización de un referéndum sobre tres leyes relacionadas con la integración europea del país, pese a que Bruselas prefiere que sean consensuadas entre Gobierno y oposición a que sean sometidas a consulta popular.

Esta iniciativa fue tomada por el Partido Democrático (PD), del primer ministro conservador Sali Berisha, después de que la oposición socialista se negase a respaldar estas tres leyes, impidiendo así lograr el apoyo de tres quintos del parlamento necesario para su aprobación.

Albania solicitó en 2009 el estatus de país candidato a la adhesión a la Unión Europea (UE), una demanda rechazada por Bruselas, que ha condicionado su respuesta positiva a la implementación de una serie de reformas como la lucha contra la corrupción y el crimen organizado, y la independencia del sistema judicial, entre otros.

Las tres leyes que serán sometidas a referéndum popular competen a reformas sobre el Tribunal Supremo, la Administración Civil y el reglamento del Parlamento y son consideradas por Berisha como indispensables para la integración europea de Albania.

Por ello, el primer ministro acusó al líder del Partido Socialista, Edi Rama, de mantener "rehén" el futuro europeo del país por no apoyar estas reformas.

Por su parte, los socialistas han considerado el referéndum un "juego político" del primer ministro para responsabilizar a la oposición del fracaso en el proceso de integración.

La oposición sostiene que el estatus del país candidato depende ante todo de la celebración de las elecciones generales libres y democráticas el próximo 23 de junio y la aplicación en práctica de las leyes.

El referéndum se celebraría a finales de este año, ya que la Constitución albanesa impide la celebración de consultas populares durante los seis meses anteriores y los seis posteriores a unas elecciones.

El comisario europeo de Ampliación, Stefan Füle, ya ha criticado la iniciativa del referéndum y ha abogado por el consenso y el diálogo político para llevar adelante las reformas necesarias.

"Yo he declarado de forma repetida que las leyes y el reglamento del Parlamento deben ser aprobados con consenso entre la oposición y el Gobierno y por este motivo es difícil entender esta decisión que está en contradicción con el espíritu de inclusividad", afirmó Füle.

En cambio, Berisha consideró que "el derecho del ciudadano a expresarse sobre cuestiones importantes nunca puede negarlo nadie".