Alberto Garzón (IU): "Tengo muy claro que pactaremos con Podemos"

    • Alberto Garzón acaba de publicar 'La Tercera República' (Ediciones Península) justo cuando abdica el Rey Juan Carlos. "Es de lo poco que le agradezco, confiesa irónico.
    • Da por hecho pacto con Podemos aunque no de siglas, sino de programa y cree que Felipe VI lo tendrá muy complicado.
Nuevas Generaciones inicia la expulsión de un militante por amenazas a un diputado de IU
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Con 28 años, es el diputado más joven del Congreso y también el más mediático. Su cuenta de Twitter suma más de 200.000 seguidores, el doble que los que tiene la Casa Real, a la que Alberto Garzón ataca en su último libro"La Tercera República" (Ediciones Península), en el que defiende un proceso constituyente que cambie de forma radical las instituciones públicas y consolide una "democracia plena en la que los únicos reyes que quedarán serán los de la baraja".

Por las redes han corrido los mensajes que con guasa comentan que Garzón sabía desde hace tiempo la noticia del siglo. Quién le iba a decir a él que el Rey le haría la mejor promoción del libro. "Lo cierto es que va a ser de lo poco que le agradezca yo a Juan Carlos", responde con ironía.

Garzón se ha resignado ya a que le pregunten por el fenómeno de Podemos. Muchos de sus miembros, dice, son amigos personales, aunque él no se deja tentar de momento y defiende sus siglas, "Yo soy militante de IU desde siempre", asegura tajante. Aunque sí reconoce "contactos informales" entre formaciones y defiende una gran alianza electoral para 2015, al estilo de una "Syriza española".

Menudo momento para sacar el libro...
Casualidad. La verdad es que es una buena noticia. Iba de camino a televisión para promocionarlo y me enteré...

¿Qué razones ve usted detrás de la abdicación?

Creo que ya estaba preparado, tarde o temprano iba a ocurrir, por motivos de salud o por otros motivos...Lo que ocurre es que el hecho de que haya sido justo una semana y un día después de las elecciones europeas nos hace pensar que es la crisis del bipartidismo y los resultados del PP y PSOE que han perdido millones de votos, que se han quedado en un 50% cuando tenían un 80%, lo que ha encendido las alarmas y ha precipitado esa decisión. Es la segunda cabeza que cae como consecuencia de las elecciones europeas, la primera fue Rubalcaba, la segunda Juan Carlos, y nos encontramos ante un escenario que se abre, que es de esperanza para la izquierda. Y si este escenario se mantuviese en las nuevas elecciones sería más dificil...


Según usted, la razón es garantizarse una mayoría parlamentaria entonces.
Sí, para hacer una sucesión más tranquila de lo que sería, seguramente según todas las encuestas, el futuro escenario parlamentario. El PP y el PSOE son los dos pilares que han sostenido la monarquía y si tuviesen que hacer en un futuro la sucesión se encontrarían con un problema.


¿Cree que el Rey podría intuir un posible procesamiento de la infanta?
Puede haber influido, aunque lo pongo en un segundo lugar frente a la crisis del bipartidismo. La monarquía está asociada a la vieja política, la de la corrupción, el caciquismo, el caso Gurtel, la caza de elefantes en Botsuana, el uso de la sanidad privada cuando la mayor parte de la población se encuentra con recortes en la sanidad pública, el caso de la intermediación comercial del Rey y la poca transparencia que existe... la capacidad de hacer preguntas sobre el Rey porque se considera quees el ánmbito privado, a pesar de ser sostenidos con dinero público. Todo eso sitúa a la monarquía en el eje de la vieja política. Y saben que la gente está demandando una nueva política sobre todo a raíz del 15-M. Todos los intentos de la Casa Real incluso haciendo que Hacienda cambie su criterio sobre las facturas falsas de la Infanta nos llama la atención de que estamos hablando de una institución que busca protegerse como puede.


Se debate si España es o no monárquica, pero lo cierto es que antes de todos esos escándalos las encuestas sí le daban un amplio respaldo. Le cito una de Sigma Dos de principios de este año que dice que el 57% de españoles creen que don Felipe podría recuperar la confianza en la Corona...
Creo que en España se ha dado un relato de la Transición de ciencia ficción, en el sentido de que es una construcción muy sesgada, un relato donde se le dio ese papel protagonista a Juan Carlos y además se generó un pacto de silencio por el cual no se podía hablar de la Casa Real en ningún medio de comunicación. Ese elemento se rompió hace unos años con elementos que han ido mermando de forma muy rápida la imagen de la Casa Real, no de Juan Carlos, de la Casa Real como institución. Y eso le afecta también a Felipe. No vale con un cambio decorativo. Yo creo que la Casa Real está condenada a ser muy mal valorada, por su anacronismo y por el comportamiento en un momento en que los contrastes con el tema de la sociedad son muy fuertes. Felipe de Borbón debería ser el mejor comunicador de márketing político del Universo para poder compensar esa tendencia. Felipe se inserta en esa Casa Real sin que se modifiquen las relaciones institucionales, volveremos a no saber cuánto cuestan sus viajes, cuánto cobra exactamente, con quién viaja... a pesar de que es dinero público. Y eso va a seguir mermando la inmagen de la Casa Real, por más nuevos relatos que quieran construir.


Se centra usted en la opacidad para criticar a la Casa Real. Pero sí se valora su papel estabilizador o en las relaciones exteriores, ¿no le puede reconocer nada a la Monarquía?
Yo me centro en la opacidad porque es un elemento político. Se habla de la estabilidad, de la responsabilidad, ¿pero responsabilidad frente a quién? Es decir, quienes están apoyando a la Monarquía son PP, PSOE y la CEOE, los grandes beneficiados de la crisis, los que están despidiendo a trabajadores a pesar de tener beneficios multimillonarios. Son Telefónica o Banco Santander los que apoyan al Rey. El Rey realiza viajes oficiales que pagamos todos, acompañados de empresarios privados que negocian con Gobiernos extranjeros y nosotros no pintamos nada. Entiendo que sea positivo para esas empresas y para las grandes fortunas, pero la mayoría de la población vive ajena a esos tejemanejes. El Rey no nos aporta nada a la mayoría de la población.


Según Rajoy, quién quiera República que plantee una reforma constitucional, ¿lo hará su partido?
Sí, somos partidarios de un proceso constituyente, creo que es más beneficioso que una reforma constitucional, porque permite a la ciudadanía debatir su propio proceso de un sistema político para nuestro país. De todas formas, es posible hacer un referendum ya. Solo hace falta voluntad política. Se pacta un referendum y se pulsa cuál es el ánimo de la población. Rajoy sigue viviendo en su burbuja, como Rubalcaba, como la Casa Real y no percibe lo que fue el 15-M, el día de ayer, ni las elecciones europeas... no se hace una lectura de lo que está sucediendo fuera de Moncloa y Zarzuela. El PSOE, por ejemplo, apoya como aparato a la Monarquía pero sus militantes, su base, suelen ser republicanos. Por tanto, si en lugar de hacer que las decisiones las tomen los partidos, sino los ciudadanos, quizás no esté tan claro que la Monarquía sobreviva.


Es cierto que las elecciones europeas dieron un castigo al bipartidismo, pero es verdad también que la mitad de los votantes no acudieron a las urnas porque no creen en ninguna formación. Ni en ustedes, ni en Podemos, ni en ninguna.
Efectivamente, y es quizás la noticia más importante. El nivel de abstención, gente que probablemente lo que impugna es el sistema político en su conjunto, que no confía en ninguno, que cree que la política no es útil. Ese es el reflejo de muchos fenómenos que están ocuriendo. Efectivamente, se está vaciando de contenido al Congreso, al Parlamento Europeo, frente a un BCE que no es democrático. A nuestro Congreso le pasa algo parecido. Al final, el presidente del Gobierno que elegimos, tiene que pedir por favor a las grandes empresas que le presten dinero y que hagan determinadas políticas, nos damos cuenta de que el Congreso tampoco tiene capacidad. Ese sentimiento se une con un cúmulo de noticias sobre corrupción, enchufismo, que generan apatía política. Fuerzas que luchamos contra eso recibimos apoyo, pero no logramos seducir suficientemente como para lograr un contrapoder.


Podemos ha sido capaz de convencer a un electorado al que no había llegado IU, a pesar de tener un programa similar, ¿han hecho ustedes autocrítica?
Creo que lo que ha pasado es que nosotros venimos de una organización que tiene historia, buena y también cosas negativas. En Bankia, por ejemplo, había gente involucrada que pertenecía a IU. Esas personas están expulsadas pero ha generado en el imaginario español una identificación de IU con las fuerzas de PP y PSOE, por lo tanto para esas personas ha sido imposible confiar en IU, tal y como lo han hecho con Podemos, que es una fuerza que ha puesto el acento más en la regeneración política, y creo que por ahí va la lectura.

Lo pone difícil para IU, porque es difícil librarse de la Historia...

No, pero lo que tenemos que hacer es dar ejemplo. Y lo damos, porque los que estaban en Bankia ya no están en IU, pero se actuó tarde y entonces lo que hay que hacer es una reestructuración interna de IU, democratizar al cien por cien la organización para permitir que los militantes puedan sentirse aún más útiles de lo que ya lo son y asemejarlo más a un movimiento social que a un partido político clásico. Eso nos va a permitir mejorar la imagen y la utilidad de IU, que va a un sector de población muy determinado que puede ser complementario con otras formaciones de izquierdas, como Podemos, que juntas, porque IU sola no va a poder, estaremos en condiciones de iniciar un proceso constituyente.

Piensan entonces en el pacto con Podemos...
Sí, yo creo que IU lo tiene muy claro. De hecho lo llevamos en el nombre, Izquierda Unida...


Suena a oportunismo...
Oportunismo no, porque yo desde el principio de Podemos le di la bienvenida, los consideré compañeros, algunos son amigos en el trato personal, y los consideré compañeros porque compartimos proyecto político común. Diferimos en algunos elementos programáticos...


¿En qué por ejemplo?
En estrategias, en discurso, en la utilización del lenguaje. Yo no aceptaría el concepto de "casta" política, creo que eso es falso, no son buenas herramientas para entender la sociedad, entiendo que hay gente que lo use, pero yo no lo usaría. Hay elementos programáticos que habría que discutir, aunque en IU también ocurre. Pero sí creo que tenemos que mirar hacia una unidad del programa. Y hay muchos elementos si uno pone los programas juntos, hay elementos comunes y complementarios. Y eso nos podría permitir trabajar en algún tipo de confluencia. Que esa confluencia se trate de una alianza electoral es algo que hay que discutir con serenidad entre todos. No se puede determinar de un día para otro, pero sí que es verdad que es necesario. Porque además hay unas elecciones generales y la ley electoral nos sanciona si no lo hacemos, porque somos fuerzas pequeñas que si no vamos juntos nos vamos a penalizar. Y así multiplicamos, si conseguimos hacerlo con inteligencia y que los electorados de cada una se sientan reflactarios el uno con el otro.


¿Hay conversaciones en marcha en este momento?
Informales muchas, formales todavía es muy temprano.Hay que iniciar un debate interno, sereno, dentro de las dos organizaciones y que se posicione la militancia. Informales muchas porque somos parte de las mismas redes de amigos, de activismo social y político. Yo soy muy optimista, pero creo que hay que hacerlo bien. En política si se hacen mal las cosas, uno y uno puede dar uno y medio o incluso 0'5, o puede dar cinco. Hay ejemplos positivos y negativos.


¿Se dejaría tentar por Podemos?
No, en absoluto. Yo soy militante de IU desde siempre, y además del PCE., dirigente federal y creo que este el instrumento útil para transformar la sociedad. Lo que sí que tengo muy claro es que ante todo va el programa y después las siglas. Por lo tanto, siempre voy a permanecer en mi organización, pero me da igual la que creemos, o una plataforma, no me importa que no vayamos a las elecciones como IU sino con otro nombre, la Syriza española, o lo que le quieran llamar, pero dentro de una organización. Hay que tener una estructura porque presentarse a unas elecciones cualquiera necesita su publicidad en los medios, un ejemplo es el de Podemos, pero cuando te quieres presentar en 8.000 municipios, necesitas 10 candidatos mínimo, y entonces estamos hablando de 80.000 personas, y tienes que tener una estructura con gente que esté de acuerdo, se necesita una organización. Y eso Podemos no lo tiene, nosotros sí.


¿Puede ser ese el gran problema de Podemos? Usted habló alguna vez de los egos de la izquierda, ¿Puede ser un problema?
Sí, es uno de los problemas fundamentales de la izquierda. Creo que hay que dar un salto. Los liderazgos individuales que nos hablan del Mesías, Julio Anguita, Pablo Iglesias, Cayo Lara, Alberto Garzón.... hay que pasar a un liderazgo colectivo, en el que la solución no la tiene uno, la tiene el debate colectivo. Creo que eso lo podemos resolver con pluralismo también dentro de las organizaciones.


Su discurso suena al de Julio Anguita, ¿se siente más afín a esa vieja guardia del partido que a Cayo Lara, por ejemplo?
Mi generación, políticamente hablando, es de Julio Anguita. Para mí es un referente político por su honestidad y principios , pero también se aprende mucho de él, es amigo. Cayo comparte el programa de Julio Anguita , puede discrepar en algunos elementos, como yo mismo discrepo de algunos elementos de ambos. Pero ante todo permanece un proyecto político. Si no, probablemente, o Julio o Cayo dejarían de estar en IU. Y dentro de esa unidad, hay discrepancias, pero siempre dentro del mismo proyecto político. Por eso no me parece que se pueda hacer una diferencia más allá de matices.


Hablaba usted de pactos. En Andalucía tienen ustedes un pacto marcado por los ERE que no convence ni siquiera a la presidenta Susana Díaz..
El pacto andaluz tiene elementos positivos y negativos. El pacto se hace sobre un programa y el caso de la Corrala dejó claro que IU no está allí por los sillones. Demostró también que para el PSOE andaluz el pacto es un obstáculo porque están preparando una estrategia de gran coalición para 2015, porque las encuestas corroboran que PP y PSOE no van a tener mayoría absoluta ninguno de los dos. La necesitan si quieren mantener la hoja de ruta de la Troika, en la que siempre están de acuerdo, y no digo repartirse ministerios, pero sí apoyar la investidura el uno del otro. En ese sentido, la experiencia andaluza se convierte en un obstáculo que intentan desbaratar metiendo ruido y presentando a IU como irresponsables y populistas, cuando es justo lo contrario.


De populista se tacha el programa de Podemos y también el suyo. Contemplan la intervención del Estado, pero eso puede ahuyentar la inversión extranjera. Defiéndame su sostenibilidad.
Yo lo tengo muy claro. Se puede. La nacionalización de la banca, por ejemplo. Ya ha habido banca pública en España. Si hablamos de reindustrialización, ya se hizo. Alemania se recuperó de la Segunda Guerra Mundial con un proceso así. Defendemos una reforma fiscal progresiva, lucha contra el fraude fiscal y financiación del BCE. Pero muchos de estos elementos, por no decir todos, no se pueden hacer por el actual marco institucional de la UE. El BCE sólo se preocupa por la inflación, no por el desempleo. Y tiene prohibido prestar dinero. Mientras eso sigue siendo así, España no se va a recuperar, porque necesita la inversión. Y para llevar a cabo nuestro programa, necesitamos cambiar eso. Si se cambia esa arquitectura, sí se puede llevar a cabo, pero no quiere decir que sea gratis. Hay costes que paga una minoría de la población que es la más adinerada, que es la que está en contra de nuestra reforma fiscal y nos acusa de populista, demagogos, y otros insultos, porque es su función.


Esta semana, conocíamos buenos datos del paro. ¿Puede llevar al PP a fortalecerse de cara a 2015?
Creo que hay que mirar las tendencias, más allá de los cambios mes a mes. Y el propio PP plantea que va a haber una tasa de paro superior al 20% hasta 2018. Eso es insostenible y va a hacer imposible que mejore su imagen. Lo va a intentar, es su función. Pero el empleo que se genera es precario, los jóvenes necesitan pluriemplearse... Es un escenario dramático, y por mucho que las cifras cambien, la realidad sigue siendo la que es. La de la precariedad, del desempleo, de la miseria. Es un caldo de cultivo explosivo. El PP va a intentar que esa frustración se convierta en resignación. Y por eso a ellos les viene muy bien la abstención. Que no voten mejor a que voten a una fuerza de izquierda. Pero no creo que consigan convencer a la ciudadanía de que se sale de la crisis. Tener ligeros incrementos del empleo no cambia la situación dramática de una gran parte de la sociedad.


¿Por qué debería creer que ustedes van a acabar con la precariedad?
Poque estamos dispuestos a enfrentarnos a los que toman las decisiones a su favor a cambiar al BCE, las instituciones españolas y europeas, y a enfrentarnos a las grandes empresas y fortunas que son capaces de tener beneficios millonarios y seguir despidiendo a trabajadores.


¿Cree que el auge de Pablo Iglesias puede hacer que IU tome nota y lo sitúe a usted como cabeza visible?
Yo tengo una visualización mediática muy importante, tanto antes como ahora..


Tiene más seguidores en Twitter que la Casa Real...
Bueno, espero decir algo más interesante que la Casa Real. Pero la cuestión orgánica de IU la decidirán los militantes. La presencia mediática la deciden los medios de comunicación privados y yo voy a aprovechar allí donde me llamen y me pida la organización. Hay que estar en los salones de la gente, en prensa, en medios y hacer pedagogia, porque este es un cambio cultural y de la forma de ver el mundo. Y hay que convencer. Yo voy a estar donde se pueda. Pero que después eso se jerarquice de una forma u otra, son batallas que todavía quedan para 2015.

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