Beatriz Corredor, la ministra desconocida

El Ministerio de Vivienda queda eliminado y pasa a formar parte del Ministerio de Fomento

La petición de la oposición fulminar el Ministerio de Vivienda es una constante. Sin embargo, el nombre de su responsable, Beatriz Corredor, apenas se menciona, ni para recibir un chaparrón de críticas ni para loar su labor.

Y esto es algo que se traslada a la ciudadanía. En el estudio que el CIS publicó a principios de agosto, Beatriz Corredor era la más desconocida. Más de cinco de cada 10 españoles no sabe quién es. Incluso para los votantes del PSOE, el 56% de ellos desconoce quién es.

A este dato hay que añadir un parámetro negativo en su curriculum de ministra: es una de las peores valoradas del Ejecutivo de Zapatero, con una nota de 3,03. Sólo ha tenido peor nota Ángeles González Sinde con un 2,98.

Entró en el gabinete de Zapatero de la mano de su protector, Miguel Sebastián. Mientras a él le encargó de Industria, a Corredor le encomendaron sustituir a Carme Chacón en Vivienda, la misma cartera de la que hasta entonces era responsable en la oposición en el Ayuntamiento de Madrid.

De hecho, su paso por la política municipal madrileña ha provocado que su nombre también salga en las quinielas para las próximas elecciones autonómicas y municipales de esta Comunidad.

Entre los logros ejecutivos de esta registradora de la propiedad, sólo se puede destacar la Renta Básica de Emancipación, la ayuda de 210 euros al alquiler para jóvenes.

Sin embargo, este mismo verano Corredor metió el tijeretazo en su departamento, en concreto a "algunos incentivos a la construcción y la compra" de viviendas protegidas para priorizar las ayudas al alquiler y la rehabilitación de inmuebles. Unos recortes que, en plena crisis, no sentaron muy bien.